Las comparecencias en la comisión de investigación de la dana empezaron ayer con la participación de ingenieros y arquitectos. Los distintos partidos, convertidos en una especie de abogados defensores de sus tesis respecto a lo que ocurrió y a los responsables de la tragedia, intentaron con sus preguntas condicionar de manera muy evidente la respuesta de los participantes.
Así, el PP preguntaba si era más útil para salvar vidas con un SMS o que se hubieran hecho las obras de encauzamiento e incluso pedían a los técnicos que se pronunciaran sobre las bondades del plan de recuperación de Mazón. Algunos directamente ni contestaban porque no conocían el proyecto presentado o simplemente apuntaban, en referencia a la disyuntiva planteada por los populares, que todo hubiera ayudado: las obras y la alerta.
Mientras el PSPV incidía en cuestionar sobre la responsabilidad del Gobierno de Mariano Rajoy en la paralización de las obras del barranco del Poyo o en preguntar al compareciente si le parecía bien que el president hubiera estado hasta tarde en El Ventorro y que no acudiera hasta las 20:28 horas al Cecopi. Uno de los intervinientes puso en duda que el president tuviera que estar en el órgano y recordó las estrecheces económicas de Rajoy cuando llegó al Gobierno. “Las obras son importantes, pero no urgentes, lo que no podemos estar es 20 años sin hacer una intervención”, destacó Federico Bonet, exdecano del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos.
Vox incluso se atrevía a pedir más contundencia al primero de los participantes -Javier Machí, decano de la demarcación del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos en la Comunidad Valenciana- intentando que reprodujera un titular que ya salió de su comparecencia en el Senado. “No sé si lo dije así o fue una interpretación del periodista”, indicó Machí que trató de ser comedido en sus palabras en esta ocasión.
Uno de los comparecientes duda de si Mazón tenía que estar en el Cecopi
Cambiaban los comparecientes y las preguntas de los grupos se repetían intentando incidir en aquellos aspectos que más les interesaban para defender sus argumentos. Tras las respuestas -muchas de ellas evasivas cuando por ejemplo se les preguntaba por la influencia de la ley de la huerta o del cambio climático- los diferentes portavoces parlamentarios intentaban interpretarlas para apuntalar sus relatos.
Lo cierto es que si bien los técnicos que comparecieron, todos ellos propuestos por PP y Vox, sí que convinieron en señalar que las obras en el barranco hubieran reducido el impacto de la dana, tampoco estos se ciñeron estrictamente al guion pensado por la mayoría conservadora. De hecho, el diputado del PP Fernando Pastor parecía más preocupado en debatir con la oposición que en preguntar a los comparecientes, lo que elevó los ánimos del debate hasta el punto que la presidenta de la comisión, Miriam Turiel (de Vox), tuvo que intervenir en determinadas ocasiones.
Los técnicos sí que avisaron que si se hubieran hecho las infraestructuras hidráulicas se habría limitado el impacto de la riada
El PSPV, por su parte, se dedicaba a intentar centrar toda la responsabilidad en la Administración autonómica y exculpar al Gobierno recordando que la Declaración de Impacto Ambiental de las obras del barranco del Poyo caducó durante el mandato de Rajoy. Vox se erigía con duros calificativos como “criminal” como azote del Gobierno central. Ni una crítica a la gestión autonómica por parte del portavoz de la derecha extrema. Fue curioso cuando el segundo de los comparecientes incluso llegó a corregir al síndic de la formación de derecha extrema y a hacerle algunos matices sobre la presa de Forata.
Solo el parlamentario de Compromís Jesús Pla -que se caracteriza por una exposición sin aspavientos en sus exposiciones- parecía estar más abierto a preguntar y a conocer la opinión de los comparecientes. Seguro que no es el perfil de todos los participantes de Compromís en el futuro.
Rifirafe entre el PSPV y Julio Gómez-Perretta
El momento más tenso de la jornada matutina se produjo cuando el síndic del PSPV, José Muñoz, desautorizó las valoraciones del arquitecto Julio Gómez-Perretta que, en un artículo de opinión titulado Sánchez y la izquierda miserable, había calificado de criminal la estrategia del presidente del Gobierno tras la dana. Para Muñoz, Gómez-Perreta acudía como opinador en lugar de como experto, lo que calentó los ánimos y obligo, de nuevo, a la presidenta de la comisión a intervenir. PP y Vox defendieron el curriculum del compareciente que ellos mismos propusieron y pidieron al portavoz socialista respeto. En su exposición, además de defenderse, Gómez-Perretta defendió la construcción de presas de cabecera y un nuevo plan sur que llevara el agua hacia L'Albufera.
Tras la primera jornada con las intervenciones de los técnicos, lo que queda claro es que la comisión de investigación de las Corts, de momento, se centra más en las infraestructuras hidráulicas y en los retrasos en las obras dependientes del Gobierno que en la gestión de la dana de ese fatídico 29 de octubre. Un foco que favorece los posicionamientos de la derecha. Hasta después de verano, no habrá más comparecencias.