El cardenal Antonio Cañizares, arzobispo emérito de Valencia, ha sido dado de alta del hospital, tras presentar una evolución favorable, y se ha trasladado a su residencia habitual donde seguirá recibiendo la atención médica que necesita, según han informado fuentes del Arzobispado de Valencia.
El purpurado fue ingresado el pasado 7 de agosto en el Hospital debido a su delicado estado de salud. Desde el Arzobispado se agradecen las muestras de afecto recibidas hacia el cardenal.
Antonio Cañizares Llovera, natural de Utiel (Valencia) y de 79 años de edad, era uno de los cinco cardenales españoles que tenía derecho a voto en el cónclave para la elección del sucesor del papa Francisco, pero ya no acudió a Roma el pasado mes de mayo por motivos de salud. Nombrado por el papa Francisco, tomó posesión el 4 de octubre de 2014 y fue arzobispo de Valencia hasta el 10 de octubre de 2022.
Es el arzobispo emérito de Valencia desde octubre de 2022, cuando el papa Francisco aceptó su renuncia y nombró como sucesor a Enrique Benavent.