Los dulces navideños pueden causar una serie de problemas en la piel. Los turrones, el roscón o los polvorones están deliciosos y no faltan en las comidas y cenas que se celebran estos días, pero también son un verdadero “Grinch”, ya que el exceso de azúcar puede pasar factura a la salud cutánea.
La ingesta de glucosa incrementa la probabilidad de glicación, un fenómeno químico que ocurre cuando un nivel elevado de azúcar sanguíneo se enlaza de manera involuntaria a las proteínas corporales, tales como el colágeno y la elastina. Dichas proteínas son fundamentales para conservar la piel tersa, flexible y radiante, pero al adherirse los azúcares, se forman las partículas conocidas como AGEs, las cuales modifican la configuración inicial de estas fibras, haciéndolas inflexibles, quebradizas y causando perjuicios en su funcionamiento.
Un exceso de dulces navideños afectan al estado de la piel
La doctora María Panadero, experta en medicina estética y longevidad, detalla cómo este fenómeno influye y de qué manera se puede mitigar su efecto para conservar una piel saludable y no lamentar el trozo de roscón de nata o polvorón de almendra que ha endulzado las celebraciones.
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La experta señala que la glicación se inicia aproximadamente a los veinte años, y si bien otros elementos influyen, como la exposición a los rayos UVA, las condiciones ambientales, la exposición prolongada a la polución o la predisposición genética, el azúcar es su detonante principal. Esta transformación discreta puede intensificarse con costumbres habituales durante festividades, caracterizadas por un consumo elevado de golosinas o bebidas alcohólicas, manifestándose en la piel con señales claras de pérdida de firmeza, arrugas más pronunciadas y una textura desigual. En definitiva, la piel experimenta un envejecimiento prematuro.
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“No se trata de no disfrutar de la Navidad plenamente aunque hay que tratar de reducir los picos de glucosa para ayudar a minimizar la glicación, la inflamación y la oxidación de manera acelerada. Una alternativa más saludable sería alternar dulces con frutos secos, frutas, infusiones y beber agua en cantidades óptimas, además de priorizar los alimentos con bajo índice glucémico, siempre que sea posible”, indica.
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La buena noticia es que estos efectos negativos pueden ser aliviados mediante procedimientos como Hydrafacial o Hydrafacial Premium, un protocolo más exhaustivo que integra drenaje linfático, exfoliación, hidratación y la capacidad regenerativa de la terapia LED.
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En el hogar, es importante que el régimen de belleza incluya sueros y lociones que contengan carnosina, un péptido que “distrae” a las partículas de glucosa antes de que se unan a las hebras de colágeno y elastina; agentes antioxidantes como la vitamina C o la vitamina E para luchar contra el daño oxidativo, y retinoides para promover la regeneración celular.