Los malentendidos, los enfados y las pequeñas discusiones no van a dejar de suceder nunca, por mucho que el trato o la convivencia entre dos personas sea muy buena. Es por ello que, cuando la forma que tiene cada uno de gestionar estos conflictos es muy distinta, cualquier tontería puede escalar a una discusión mayor.
Y es que hay personas que, cuando, por ejemplo, se ha dado un malentendido, necesitan hablarlo con la otra persona al momento. Sin embargo, hay otras que necesitan pasar un tiempo solos para pensar en lo que ha sucedido o, simplemente, porque no quieren decir cosas 'en caliente' de las que luego puedan arrepentirse.
Pero estas dos formas tan antagónicas de enfrentarse a los conflictos pueden suponer un dolor de cabeza cada vez que sucede cualquier pequeño rifirrafe. El psicólogo y terapeuta de pareja Adrián Chico comparte un vídeo en sus redes sociales sobre las dinámicas que suelen generarse cuando dos personas así de distintas en este aspecto discuten.
En el vídeo, Chico hace una representación de lo que podría decir y sentir cada tipo de persona durante la discusión, para luego lanzar una reflexión sobre la escena que ha mostrado. El psicólogo apunta que, seguramente, habrá dos puntos de vista sobre la discusión que ha simulado.
“Algunos esteréis agobiados por el que no quiere hablar. Le veréis como una víctima, un manipulador, que es insistente, pesado, incluso caprichoso... Y otros pensaréis que el otro es un pasota, que no tiene emociones, que no le importa su pareja, que es un egoísta, desagradable y frío”, expone el experto en salud mental.
Reacciones en redes
“Os juro por mi madre que esta conversación la he tenido tal cual con mi novio en todas las discusiones”
Y ambas posturas pueden tener razón, señala el experto, que insiste en que la clave es “entender desde dónde se está vinculando cada uno y la forma de comprender la dinámica de conversación del otro”. Hacer este ejercicio es indispensable para lograr llegar a un punto medio en el que los dos puedan estar a gusto, aunque sea cediendo un poco de lo que cada uno quiere.