Cuidar de nuestra salud es imprescindible, tanto a nivel físico como mental. De forma similar al cuerpo, el cerebro sufre las consecuencias de un día a día que a menudo puede ser agotador. Tan pronto como nos despistamos, podemos sentir dolor, agotamiento, pulsaciones, ansiedad, nervios y muchas más afectaciones. El cuerpo debe estar limpio por dentro y por fuera, pero la mente también merece una atención especial.
Una de las personas más destacadas en España alrededor de esta causa es la psiquiatra Marian Rojas Estapé, actualmente la autora literaria de no ficción más vendida del país. Sus constantes intervenciones aportan reflexiones sobre nuestras acciones y sensaciones, y qué se podría hacer para mejorarlas. Durante una de sus últimas apariciones en plataformas digitales, la madrileña indagó en cómo el optimismo puede influir en nuestro tráfico de pensamientos.
“El optimismo es una forma de conectar con la realidad. El optimismo se puede educar y se puede potenciar. Hay muchas personas que dicen ‘es que yo he nacido así’. Hoy en día conocemos la neuroplasticidad, esa famosa neuroplasticidad de la que hablaba el gran don Santiago Ramón y Cajal, que decía: ‘todo ser humano, si se lo propone, puede ser escultor de su propio cerebro’. La clave está en el ‘si se lo propone’. Si se lo propone significa que yo le meto actitud a la vida”, comentaba.
“La actitud es algo importantísimo, pero la actitud está íntimamente relacionada con el resultado de lo que yo voy a hacer (…) Cómo yo me hablo antes de realizar ese reto, esa entrevista de trabajo, esa reunión, esa cita con alguien. Es decir, cuando uno es pesimista es muy difícil que las cosas le salgan bien. El pesimismo es una voz interior machacante, que te impide ver las oportunidades que tienes en tu entorno”, profundizaba.

Marian Rojas Estapé
Cambiar el punto de vista
“El optimismo no te asegura el éxito, pero te acerca a ver esas oportunidades en la vida. El optimismo es ver que existe esperanza, fe, confianza en el entorno, en las circunstancias, en aquello que te propones. Para ello, tienes que diagnosticar cómo te tratas, cómo es tu voz interior. ¿Es una voz interior que te recuerda constantemente lo que no has sido capaz de lograr?”, preguntaba, aportando los detalles de estos pensamientos negativos.
“No olvides algo importante: tu cuerpo está constantemente escuchando cómo te tratas. El cuerpo no miente, la mente exagera, la mente es dramática. Seguro que si te pido que, después de este vídeo, te escuches un momento, puedes tener un pensamiento dramático, un poco apasionado, de extremos. El cuerpo siempre dice la verdad. Si el cuerpo somatiza es que algo está pasando. Intenta comprender cómo tu cuerpo está escuchando tu pensamiento, ese pensamiento positivo o negativo”, recomendaba.