Muchos conocen a Álex Algarci como uno de los mayores influencers y divulgadores de economía del panorama nacional. El joven es asesor fiscal y experto en impuestos a nivel internacional, además de una de las figuras más relevantes en redes sociales sobre este tema, participando en todo tipo de podcasts y debates sobre temas económicos. Por si todo esto fuese poco, Algarci es también fundador de Fixcal, su propia empresa especializada en soluciones fiscales para empresarios y autónomos.
Llegar hasta ahí le costó lo suyo. Algarci recuerda cómo estudió como si no hubiese un mañana. Terminó sus cursos con matrículas de honor, segundo en su promoción universitaria, con un máster… Para nada. Así se lo ha contado a Jordi Tena en su podcast, Zoom Out, revelando que ser el mejor pasó factura a su salud mental no solo porque estuvo exigiéndose a sí mismo desde que se acuerda, sino porque al enfrentarse a la realidad del mercado laboral se dio cuenta de una cosa: siempre había alguien mejor que él.

Álex Algarci, asesor fiscal: “Tenía todo lo que quería y aún así no era feliz”.
“Siempre he estado asociado a la fiscalidad de una manera u otra, porque soy hijo de asesor fiscal y a mi familia le ha dado de comer una gestoría”, comienza explicando Algarci. “Pero salí de la carrera, tuve muy buenos trabajos… Pero peto enseguida y me replanteo todo. Acabo la carrera con 22 y con 23 me estalla todo”.
Tal y como cuenta el empresario, todo comienza por su propia autoexigencia. “Venía con unas expectativas ultra mega altas de mí mismo, en parte proyectadas familiarmente. Yo tengo un hermano mayor, que es una suerte de genio y que somos clavados física y -hasta esa edad- psicológicamente”, comienza explicando.
Algarci: “O no me muevo o voy a tope, no sé moverme en esa escala de grises y lo he intentado”
Algarci cuenta cómo vivir a la sombra de su hermano mayor, Isaac, le provocó querer no solo parecerse a él, sino superarlo para demostrar su valía. “Como él se graduó siempre con matrículas de honor y cuando en el colegio, la selectividad, la carrera; sale y enseguida despega, pues yo seguía los mismos pasos”, señala.
Sin embargo, él se encontró con todo tipo de obstáculos en el camino. “Saqué matrícula de honor, en la carrera segundo de mi promoción, el máster muy bien. Era el Isaac 2. Salgo al mercado laboral y me pego la ostia de mi vida, porque cualquiera sabía más que yo; porque por muy crack que seas en lo académico, donde compites con tus iguales, luego sales al mundo laboral donde el mejor de lo académico sigue siendo un cero donde todos tienen más experiencia”.

Álex Algarci, asesor fiscal: “Tenía todo lo que quería y aún así no era feliz”.
El empresario revela cómo su ego fue “total y absolutamente incapaz de soportar” ese golpe. “Estuve desde los 23 hasta los 26-27 arrastrándome por la vida”, admite.
Finalmente, se dio cuenta que nada de lo que intentaba hacer salía bien, pero también de que la solución estaba más cerca de lo que parecía: su padre. La gestoría necesitaba ayuda pues su padre se jubilaba, él tenía todos los conocimientos necesarios para darse cuenta de lo que realmente quería hacer y contactos a nivel internacional.
“Se dio la tormenta perfecta de oportunidad por un lado y frustración por el otro y me largué”, explica. “Así nació Fixcal como tal, que fue en 2023. Aportar soluciones radicales”.