Ni cápsulas de magnesio, ni sobres de omega 3, ni gotas de vitamina milagrosa. El médico de familia Víctor Espuig ha revolucionado las redes con una afirmación tan directa como inesperada: “Los cuatro suplementos que te pueden cambiar la vida son las verduras, las frutas, las legumbres y los frutos secos”. Así, sin envoltorios brillantes ni promesas de laboratorio.
Con tono irónico y mucha claridad, Espuig empieza su mensaje preguntando si quieres conocer “los cuatro suplementos milagrosos que no solo mejoran tu calidad de vida, sino que disminuyen el riesgo de cáncer, infartos, Alzheimer, diálisis o dependencia en la vejez”. Un reclamo que podría parecer sacado de cualquier anuncio viral, pero que esconde un giro inesperado: no hay píldoras mágicas, sino un menú de mercado.
Lejos de lo que muchos esperan encontrar en farmacias o tiendas online, el médico recuerda que “los suplementos milagrosos no existen” y que lo que sí ha demostrado la ciencia, de forma contundente, es que una dieta basada en alimentos vegetales, poco procesados y libres de ultraprocesados se asocia con una mejor salud global. Menos enfermedades crónicas, más años de vida activa y mejor calidad de vida.
Espuig apuesta por llenar el plato de vegetales variados, frutas de temporada, legumbres varias veces por semana y un buen puñado de frutos secos al día. Nada nuevo, pero sí olvidado entre tanta promesa nutricional envuelta en plástico.
Llevar una dieta rica en frutas y verduras puede disminuir las posibilidades de sufrir enfermedades oncológicas
Si pensabas comprar alguno de esos suplementos que no dejas de ver anunciados en redes sociales, mejor invierte ese dinero en una alimentación saludable
El mensaje del médico no va contra la suplementación médica bien indicada, sino contra la idea de que el bienestar puede comprarse en cápsulas sin cambiar los hábitos de fondo.
La salud, según este médico, no se esconde en un bote de pastillas, sino en el cajón de las frutas y las verduras.