La alimentación es un mundo lleno de curiosidades, misterios, descubrimientos y, sobre todo, platos deliciosos. Cada cultura tiene una forma distinta de comer, usando distintos ingredientes y métodos de elaboración. Sin embargo, algunos de ellos podrían comportar algún que otro problema a la hora de consumirlas. Una de las grandes cuestiones es la forma de conservarlos y transportarlos, especialmente tras la proliferación del túper.
Los recipientes de plástico, cristal y otros materiales siguen estando muy solicitados, siendo visibles en la mayoría de pueblos y ciudades. Aun así, la principal dificultad reside en cómo mantenerlos, en particular por la suciedad acumulada y los olores. Pedro Caballero, divulgador de contenidos del hogar y presentador del podcast Amosdecasa, aportó varios consejos para conservarlos en la Cadena COPE.
“Vamos a meter un poquito de arroz en ese túper, que a lo mejor no lo vamos a utilizar durante un tiempo, lo cerramos y lo guardamos. Ese arroz lo que hace es que absorbe humedad. Luego otra cosa que nos ha pasado a todos cuántas veces, que huele mal. ¿Y qué hacemos para esos olores que tenemos mal? Pues hay una cosa que funciona bastante bien. Antes de guardarlo, vamos a coger este túper y con un cepillo de dientes que ya no utilizamos, vamos a echar un poquito de agua y pasta de dientes”, aportaba.
“Cuando nosotros nos lavamos los dientes, uno cumple varias funciones. Desinfecta, limpia. Pues aquí pasa lo mismo. Tú le das, lógicamente lo vas a lavar y lo dejas aireado, lo guardas y verás cómo eso no te va a oler. Y para limpiarlo, porque como uses tomate, eso no hay lavavajillas o nadie que lo saque, hay un truco muy fácil. Lo que hacía era que llevaba un papel de cocina”, relataba, destacando el funcionamiento del truco.

Imagen de archivo de un túper
Distintos trucos
“Mojas ese papel de cocina, haces una especie de bolita, lo metes dentro del túper, lo cierras, lo mueves enérgicamente y ese papel de cocina mojado, agitándolo con una coctelera, absorbe todo lo que es el tomate que tiene y por lo menos no lo llevas a casa tan sucio. Luego, otras cosas para que no se adhiera tanto la suciedad, por ejemplo cuando son de plástico, que los de plástico son como más propensos a que la suciedad se adhiera”, insistía.
“Vamos a coger un papel de cocina, lo vamos a untar en aceite de oliva o en aceite que tengamos y lo vamos a dar a todo alrededor. Lo dejamos ahí y echamos la comida. ¿Qué pasa? Que eso crea una película alrededor del túper y evita que por lo menos se ensucie tanto”, añadía.