La reconocida dermatóloga Ana Molina ha sido la primera invitada del primer episodio de The Glow Up Journey, el podcast que presenta la emprendedora Anna Fuster. La creadora de contenido saltó a la fama gracias a las redes sociales y a el éxito de su marca de cuidado facial, Two Poles. Durante su charla con la influencer, la experta quiso desmontar varios de los mitos más extendidos en el mundo del cuidado de la piel y del cabello.
Uno de los mitos más populares es el que asegura que cuanto más cara es una crema, mejores serán sus resultados. Por ello, la especialista lo dejaba claro. ''Que va, los dermatólogos defendemos más la ciencia y yo creo que la gente lo está empezando a entender'', comenzaba diciendo.

Ana Molina, dermatóloga: ''Es un mito que cuanto más cara sea una crema, mejores serán sus resultados. Muchas veces el ingrediente más caro es el marketing''
Además, la dermatóloga aseguraba que ''muchas veces el ingrediente más caro es el marketing''. ''Hay ingredientes muy caros, pero a partir de un límite no tiene mucho sentido. Estás pagando ya por otras cosas, que muchas veces a lo mejor es por lo que quieres pagar. Puedes pagar por estatus porque es una marca con la que quieres ser vista o por estética, porque hay botes que son realmente una joya'', afirmaba.
Aún así, la experta insistía en que ''una crema bien formulada con activos que funcionen no debería superar ciertos límites''. Sobre si la luz del móvil envejece, la experta aseguraba que se trata de una verdad a medias. ''La luz azul artificial que emiten los dispositivos electrónicos puede envejecernos, podría incluso manchar la piel, pero se ha demostrado que es ínfima'', señalaba.
Y es que tal y como explicaba, comparada con la del sol, es tan baja que no hay de qué preocuparse. ''El impacto en la piel va a ser irrelevante comparado con la azul que puede darte el sol a las 11 de la mañana sin protección'', dejaba claro.
Por otro lado, Molina aseguraba que la piel estará mucho más hidrata si se bebe mucha agua. Pero aclaraba que llegará un momento que, por más agua que bebas, la piel no estará más hidrata. ''El agua que bebes va a todos los órganos del cuerpo. Pero la diferencia por ejemplo entre el hígado y la piel es que el agua que llega al hígado se queda ahí, pero la que llega a la piel, como es el único que está en contacto con el exterior, se evapora, sobre todo en climas secos como el de Madrid. Una de las formas más eficaces para hidratar la piel es poner una buena crema hidratante que no deje que ese agua se evapore'', explicaba.