La nutricionista María de los Ángeles García García, conocida popularmente como Boticaria García o Marián García, visitaba este pasado lunes, 15 de septiembre, el plató de Zapeando, el espacio vespertino de La Sexta presentado por Dani Mateo, para hablar del famoso 'desayuno de los campeones'. Tal y como explicaba la divulgadora científica, este desayuno ''ha hecho mucho daño'' en la sociedad y ''ahora estamos pagando las consecuencias''.
Y es que hace una semana, Unicef publicó el informe sobre el estado nutricional de la infancia 2025, en el que se detalla que la obesidad se ha consolidado este año como la forma más predominante de malnutrición entre niños y adolescentes a nivel mundial, superando por primera vez al bajo peso.
Desayuno
El documento, basado en datos de más de 190 países, revela que uno de cada diez niños y adolescentes (188 millones entre 5 y 19 años) padece obesidad. Mientras tanto, la prevalencia del bajo peso ha descendido del 13 % al 9,2 % desde el año 2000, mientras que la obesidad ha aumentado del 3 % al 9,4 %. ''La culpa no es solo del croissant, pero, como señala el informa de Unicef, hay que una clara relación con el consumo de alimentos ultraprocesados'', señalaba la experta.
En este sentido, la nutricionista explicaba que el desayuno no tiene por qué ser la comida más importante del día porque lo importante es ''el global de lo que comemos en cantidad y calidad''. ''De hecho, puedes no desayunar, puedes ayunar que está de moda y que también es una opción dependiendo para qué'', aclaraba.
Comer un desayuno lleno de fibra
Sin embargo, la divulgadora científica advertía: ''Hay algo que diferencia al desayuno de otras comidas. Y es que nos puede meter directos en el hambre 'Dragon Khan', es decir, es una montaña rusa de azúcar. Cuando uno empieza el día tomando azúcar libre, como el de las galletas, los bollos o el zumo, el azúcar entra en la sangre y se produce un pico de glucosa elevado. Y como todo lo que sube baja después, se da una caída pronunciada, provocando los llamados antojos''.
No tenemos que estar estresados para comer azúcar, sino que con un desayuno azucarado nos metemos en esa montaña rusa y al cabo de las horas vamos a querer volver a meterle mano'', recalcaba. Por ello, Boticaria García aconsejaba ''evitar el azúcar libre o jugar el comodín de la fibra''. ''Se hincha en el intestino, y hace que el azúcar se absorba más lentamente'', afirmaba.

