José Carbonell, psiquiatra: ''Muchas veces intentamos retomar antiguas amistades, pero si no es natural, mejor no forzar porque nos puede generar un desgaste personal''
Bienestar
El licenciado en Medicina y Cirugía explicaba en sus redes por qué no hay que forzar los vínculos
José Carbonell, psiquiatra: ''Tus pilares no tienen que depender totalmente de la otra persona. No es egoísmo y eso es compatible con el hecho de tener pareja estable''
José Carbonell, psiquiatra: ''Muchas veces intentamos retomar antiguas amistades, pero si no es natural, mejor no forzar porque nos puede generar un desgaste personal''
El reconocido psiquiatra José Carbonell compartía hace unos días en sus redes sociales una profunda reflexión acerca de un hábito que muchas personas llevan a cabo en su día a día: forzar una relación, es decir, intentar mantener o hacer progresar un vínculo que ni es natural ni recíproco, ya sea con alguna expareja, gente de su entorno o viejas amistades.
A través de un vídeo publicado en su perfil de TikTok, donde acumula más de 132.000 seguidores, el licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad de Navarra explicaba los motivos por los que no es saludable forzar este tipo de relaciones
''Si no es natural, mejor no forzar. Muchas veces intentamos tener una buena relación cordial con las personas que tenemos en nuestro entorno, intentamos retomar antiguas amistades o hacemos todo lo posible para tener una buena relación con tu exmujer, tu expareja, con esos hijos de los que te has alejado tanto o con los padres'', comenzaban diciendo. Pero, de repente, un día te das cuenta de que estás ''forzando una situación''.
Según el experto, intentar forzar algo que no es recíproco solo generará malestar y perjudicará nuestro bienestar. ''Nos estamos amargando intentando hacer que eso fluya cuando las cosas no fluyen y eso nos está empezando a generar un desgaste personal importante y está haciendo que, donde no había fricción, haya fricción'', aseguraba.
No hay que forzar las amistades ni las relaciones con las personas de nuestro entorno
Tal y como recordaba, la clave está en saber cuál es el límite. ''Es importante el hecho de que nosotros tenemos que poder saber hasta dónde podemos hacer ese esfuerzo por retomar una cordialidad con esas personas de las que nos hemos distanciado'', afirmaba. Por ello, también hay que saber reconocer y detectar que ''si la cosa no fluye con naturalidad, no podemos forzarlo''.
''Lo que no podemos hacer es estar supeditando nuestra vida al hecho de que quizás, por aquella sensación de quedarme tranquilo conmigo mismo, quiera recibir el perdón o conseguir que haya una cordialidad otra vez donde hubo antes una ruptura o donde hubo un malestar. No podemos estar supeditando nuestro presente por todo aquello que nosotros desearíamos que fluyera con naturalidad y no lo hace. Si las cosas fluyen adelante, pero si no tampoco os dejéis vuestra salud intentando conseguir que algo que no funciona funcione'', concluía.