A pocos metros del mar, con vistas directas al puerto de la Marina y a unos pasos del Parc del Fòrum, SLS Barcelona ha aterrizado en la ciudad con una nueva propuesta de placer sensorial y escapismo urbano. En su debut europeo, la marca californiana SLS —sinónimo de lujo irreverente y estilo de vida hedonista— se instala en Sant Adrià del Besòs con un resort urbano de cinco estrellas de 53.000 m² y 471 habitaciones. Sus tres piscinas, restaurantes de autor, una coctelería de vanguardia dirigida por dos leyendas del sector y un gran spa (aún no inaugurado) están diseñados para seducir al viajero internacional y suscitar la curiosidad de los locales. En el punto de mira, los asistentes a festivales como Primavera Sound, Sónar o Cruïlla.
Es el primer resort de este estilo en Barcelona, tanto por sus grandes dimensiones como por su concepto, y su objetivo es claro: seducir al público que llega a la ciudad en busca de música y cierto hedonismo barroco, que se sienten inclinados a alojarse en hoteles de marcas que les son conocidas y de prestigio global. La amplia presencia de periodistas de las principales cabeceras llegados desde Nueva York para la presentación oficial dan muestra de la importancia del mercado estadounidense para la marca.

La escenográfica entrada cambia de color y está pensada para ser el foco de todos los instagramers
Nacida en Beverly Hills en el 2008, SLS es sinónimo de lifestyle escenográfico. En Sant Adrià, máxime por la vigencia en Barcelona del Plan Especial Urbanístico de Alojamientos Turísticos (Peuat), que establece restricciones para la construcción de nuevos alojamientos turísticos, encuentra el terreno perfecto para su expansión europea: una ciudad creativa, conectada globalmente y con una escena musical potente. Por eso se ha convertido en el partner oficial de Primavera Sound 2025 y ofrece paquetes vip con alojamiento y acceso al festival.
El edificio lo firma b720 Fermín Vázquez Arquitectos y el diseño, Rockwell Group bajo la dirección creativa de la interiorista Eva Longoria. Cada rincón —desde el vestíbulo hasta las terrazas, pasando por los pasillos que se ondulan como olas— evoca el mar y diferentes fases lunares. No es un hotel discreto. Aquí el lujo se exhibe, brilla y llama la atención, incluso con toques surrealistas y barrocos.

En el lobby, hay música en directo por la tarde y noche
“Nos inspiramos en la localización, por supuesto: el hotel se sitúa en un punto donde el río se funde con el mar. Ese encuentro de aguas simboliza el flujo, el movimiento. Pero fue la luna y su energía, sus ciclos, su capacidad de influir en las mareas y los estados de ánimo, la que marcó el rumbo del proyecto -explica Longoria-. Queríamos provocar sensaciones, como si el huésped se desplazara entre estados de ánimo: euforia, introspección, celebración…”

El restaurante y bar Lora está especializado en cocina mediterránea con toques de Próximo Oriente
La circulación líquida del hotel, con pasillos que se ondulan como olas, potencia la idea de viaje marino. Escaleras, lámparas suspendidas como lunas fragmentadas y los reflejos de los espejos componen una atmósfera maximalista y festiva, provocadora, teatral, donde las zonas comunes se organizan como pequeñas escenografías. “Los espacios se desarrollan como mundos independientes pero conectados, con guiños al agua, la noche, el cosmos… incluso los chandeliers hacen referencia a constelaciones o a mundos submarinos”, comenta Longoria. Es el caso de las lámparas Medussa del estudio MYO o la de la enorme luna roja de la Celestial Suite.
Cada habitación tiene balcón o terraza privada. Equipadas con suntuosidad, las Delight y Captivate son ideales para exploradores internacionales, escapadas urbanas y viajes románticos. Los interiores presentan tonos intensos, espejos y acentos en madera, mientras que elementos como sujetadores de cortina dorados en forma de mano y retratos clásicos intervenidos aportan un toque de fantasía. En los baños, mármol blanco muy veteado, espejos venecianos y amenities donde reinan las fragancias de la firma siciliana Florio de Ortigia. Otras, como las Captivate King Pool Access ofrecen acceso directo desde el patio de la habitación a la piscina de la primera planta, y para estancias prolongadas los Euphoria Apartments tienen sus propias kitchenettes.
Como detalle de conexión con la ciudad, cada noche una de las criaturas del jardín secreto con que Pere el Cerimoniós velaba los sueños de su reina, visitará las almohadas de los huéspedes para que se lleven un recuerdo se su estancia, otra de las ideas traviesas de este hotel.

Una de las suites con terraza
Obviamente, el hotel no lo confirma —la discreción es parte esencial del lujo—, pero no sería en absoluto descabellado imaginar a estrellas como Charli XCX, FKA Twigs, Sabrina Carpenter o Chappell Roan, cabezas de cartel del próximo Primavera Sound, descansando entre concierto y concierto en la espectacular Celestial Suite, o celebrando fiestas privadas. Con 173 metros cuadrados, es la joya del complejo, con vistas privilegiadas al mar, un baño digno de una diva del pop y una decoración que combina teatralidad y vanguardia.

Uno de los lujosos baños
Alta gastronomía y coctelería de autor
La ubicación puede parecer poco conveniente para un hotel de alta gama, pero apuesta por aprovechar el atractivo del frente marítimo y una distancia de Barcelona que, para turistas acostumbrados a moverse en taxi, resulta asumible. Además, por sus características, es ideal para grupos numerosos, eventos y viajes corporativos. Nacho Rodríguez, director general de SLS Barcelona, destacaba que “la oportunidad de crear un hotel de nueva construcción con esta escala y ambición en un entorno urbano es extremadamente rara”, y que la ubicación, junto al puerto de la Marina del Fórum y a pocos pasos de una playa ya recuperada representa una ventaja: vistas al Mediterráneo, arquitectura audaz y una distancia asumible del centro, en una zona que apuesta por emerger como nuevo polo de ocio y lujo alternativo.

El restaurante L’Anxova Divina es bar de tapas informal dedicado a los sabores catalanes. Desde pinchos y raciones hasta vermut y cerveza

Los cocteleros Manuel Spolaore, Mónica Berg y Alex Kratena
Por Mónica Berg y Alex Kratena
Kyara, la coctelería más radical del momento
El corazón líquido de este universo es Kyara, un bar conceptual creado por Mónica Berg y Alex Kratena, dos de las figuras más influyentes de la mixología que han transformado la coctelería en una disciplina artística y cultural con su bar Tayer + Elementary de Londres, clasificado año tras año entre los mejores del mundo.
La noruega Mónica Berg fue la primera mujer en recibir el Altos Bartenders’ Bartender Award y Alex Kratena alcanzó la fama como jefe de barra del mítico Artesian de Londres, reconocido durante años como el mejor bar del planeta.
Su nueva coctelería Kyara, con un nombre que se refiere a la más alta calidad de madera de aloe aromática (oud) y que abrirá el próximo 29 de junio, con Manuel Spolaore al frente, no es solo un bar, sino una experiencia que bebe de la perfumería. El espacio se centra alrededor de un estudio de planta abierta inspirado en el laboratorio londinense del dúo, donde se crean nuevas composiciones de cócteles a partir de destilados, extractos y acordes ultraconcentrados. Cada mezcla une fragancia, sabor y narrativa, en un espacio que promete marcar un antes y un después en la escena líquida de la ciudad. Su estética de fluidez minimalista explora un universo coctelero posmoderno y distópico, que, entre otros, reinterpreta desde el carajillo a los mojitos. “La idea es traducir acordes de perfume, complejidad y profundidad en cada bebida”, explicaba el mismísimo Alex Kratena, feliz de disfrutar de su skate por Barcelona mientras prepara la inauguración, a finales de este mayo.
La experiencia culinaria es otro de los pilares de este resort urbano que auiere abrirse también a la población local. Lora, diseñado con Studio Paskin, los creadores detrás de Palomar y Evelyn’s Table y The Barbary en Londres, traza un viaje gastronómico entre Beirut y Barcelona con una cocina generosa basada en el horno de leña y la parrilla de carbón. Diseñado por AvroKO en colaboración con Carte Blanched, la estética de Lora refleja un recorrido conceptual inspirado en la época dorada de Beirut y en el ambiente relajado de la costa de Barcelona.
L’Anxova Divina, por su parte, celebra la tapa reinterpretando la gilda, los espárragos a la brasa, los pimientos escalivados o el arròs a banda. También embutidos catalanes de primera y la coca de Folgueroles se visten de fiesta para un vermut frente al puerto. Por su parte, el rooftop Cósmico, una de las azoteas más grandes de la ciudad, pronto abrirá con sesiones de dj en sus dos piscinas infinitas con vistas panorámicas. El contraste entre el mar y las instalaciones industriales aporta un plus diferente al skyline del que se disfruta.

El restaurante Lora, diseñado por AvroKO en colaboración con Carte Blanched
El concepto de resort urbano se completa con un gimnasio bañado en luz natural, un estudio de spinning abierto 24/7 y un spa de diseño (se prevé abrirlo a finales de 2025). Una colaboración con Edan Studios, el estudio de fitness fundado por Anna Lewandowska, brindará acceso a clases personalizadas y sesiones de bienestar en el hotel. Y para aquellos que quieran marcar tendencia incluso en la piscina podrán nadar con estilo gracias a una colaboración exclusiva entre SLS y la marca barcelonesa de trajes de baño Caro Luna. Diseñada y producida en Barcelona, esta firma emergente ha conquistado a celebridades internacionales con su estética contemporánea y espíritu local. La colección cápsula, inspirada en ciertos detalles de la decoración del hotel, se lanzará este verano.