Diana Spencer es de esas figuras que se siempre se recordará por mucho tiempo que pase. Su muerte, tan repentina, en 1997, dejó al mundo consternado. Todos la habían visto transformarse, casi como en un cuento de hadas, en princesa tras casarse con Carlos de Inglaterra, heredero al trono británico. Pero también se supo de su tristeza, de las luchas internas, la sombra de la depresión… y, sobre todo, de las constantes infidelidades de su esposo, por lo que siempre era noticia y llenaba las portadas de todas las revistas y periódicos de todo el mundo.
Lady Diana Frances Spencer, nacida en el seno de una familia noble británica, se convirtió, sin proponérselo, en un ícono de la moda, la elegancia. Su fragilidad, su timidez y una empatía que traspasaba pantallas, enamoraron a medio mundo.
Su estilo personal fue imitado por mujeres de todas partes
Su estilo personal fue imitado por mujeres de todas partes. Algunas de sus prendas se volvieron casi legendarias. No es casualidad que, incluso décadas después, piezas suyas sigan rompiendo récords. En 2023, por ejemplo, uno de sus vestidos se vendió por más de un millón de dólares. Y en 2024, un simple par de zapatos suyos alcanzó los 390.000.
Ahora, Julien’s Auctions se prepara para algo verdaderamente especial. Anunciarán la subasta más grande jamás organizada con prendas de la princesa, se incluirá piezas únicas y majestuosas de la historia de la realeza británica, incluyendo prendas de alta costura del duque y la duquesa de Windsor, artículos históricos pertenecientes a la reina Isabel II, la reina madre, y tesoros reales que datan del siglo XIX: 200 artículos únicos, muchos de ellos jamás vistas por el público.

Testino fue el fotógrafo fetiche de la princesa Diana de Gales
Martin Nolan, cofundador y director ejecutivo, lo resumió con emoción: “La princesa Diana ocupa un lugar especial en Julien’s Auctions, y nos honra seguir preservando su legado, contando su historia a través de las piezas que definieron su elegancia, gracia, glamour y espíritu”. La expectativa es enorme. Se anticipa una subasta histórica.
El evento, titulado “Princess Diana’s Style & A Royal Collection”, tendrá lugar el jueves 26 de junio en el hotel The Peninsula Beverly Hills (Los Ángeles) . Ya está abierto el registro online, y parte de lo recaudado se destinará a Muscular Dystrophy UK, una causa solidaria como las que abanderaba Diana.

Vestido de seda con estampado floral diseñado por Belville Sassoon
Entre las piezas más esperadas está el “Caring Dress”, un vestido de seda con estampado floral diseñado por Belville Sassoon. Diana lo usó en numerosas visitas oficiales; era uno de sus básicos para los compromisos públicos.

Sombrerorosa de plumas de John Boyd
También estará el conjunto que llevó tras su boda: una chaqueta rosa salmón con falda de volantes, acompañada de un sombrero de plumas de John Boyd. Un look que selló un momento histórico y emotivo.

Vestido de dos piezas en seda amarilla y flores de Bruce Oldfield
Otro tesoro es un conjunto amarillo de dos piezas, diseñado por Bruce Oldfield. Tiene detalles que lo hacen único: un corpiño ajustado, una falda justo por encima de la rodilla y un lazo que aporta un toque de dulzura. Oldfield fue clave en la evolución del estilo de Diana en los años ochenta, cuando la prensa comenzó a llamarla con cariño “Dinastía-Di”, por sus atuendos glamurosos al estilo de la serie televisiva.

Conjunto de tres piezas de Escada by Margaretha Ley
También se subastará un traje de tres piezas que parece sacado de una serie de los noventa: blazer de cachemir gris con rayas azules, falda a juego y una blusa de seda zafiro. Todo firmado por Escada. Era uno de esos conjuntos ejecutivos que Diana solía lucir con una mezcla de fuerza y feminidad.

Un bolso Lady Dior negro de piel de cordero
Y, por supuesto, estará el icónico bolso Lady Dior negro, regalo de la primera dama de Francia. Diana lo llevó por primera vez en Argentina en 1995. Ya separada del actual rey Carlos III, comenzó a experimentar con su estilo: más libre, más internacional, más suyo.

Sudadera blanca de cuello redondo con un gráfico serigrafiado de la Fundación Británica del Pulmón
Por último, una prenda deportiva: una sudadera blanca con el logo de la Fundación Británica del Pulmón. Diana, siempre cercana, solía combinar estas prendas deportivas con pantalones de ciclista, zapatillas cómodas y un bolso grande. Era su uniforme informal en los noventa. Y sí, incluso vestida así, tenía estilo.
La moda también es parte de la historia de Diana.