A la hora de diseñar una joya, como ocurre con tantos quehaceres humanos, la inspiración suele cimentarse en el hábito. Así lo cree firmemente Aurore Melot, directora creativa de la firma alemana Thomas Sabo, que acaba de presentar su nueva colección en Berlín. “A veces es posible padecer lapsus de inspiración, pero si te acostumbras a trabajar de determinada manera, sabes cómo activarla, así que, en definitiva, es muy raro que te falte inspiración”, cuenta Melot al Magazine en el hotel berlinés donde se despliegan los nuevos collares, pulseras, anillos y pendientes.
“Estoy siempre en contacto con el equipo de diseño y siempre tengo ideas, aparte de que las intercambiamos y analizamos juntos; se trata más de encontrar el tiempo para canalizarlas, pero también es útil nutrirme con experiencias, por eso hago viajes. Me gusta mucho viajar, sobre todo a lugares con grandes espacios abiertos de naturaleza o a destinos con civilizaciones antiguas”, prosigue la creadora francesa de 34 años.
El ojo es un símbolo de protección en muchas civilizaciones
El resultado se palpa en la nueva colección Elyndra, desarrollada en consonancia con el fundador, el alemán Thomas Sabo, quien creó esta empresa en 1984. En las vitrinas vemos piedras engarzadas de colores azules y ocres, relacionados con las excursiones de Melot por el Gran Cañón del Colorado en Estados Unidos, y brazaletes y colgantes que evocan orfebrerías vinculadas a templos de México, país que también le encantó visitar.
Hay variedad de gemas: del ojo de tigre y la aventurina verde al ágata roja, el jaspe amarillo o las circonitas rojas y blancas, montadas en piezas de plata de ley 925 reciclada, con baño o aplicaciones de oro de 18 quilates. La joyería en plata de estas características, confeccionada a mano, es el espíritu básico de la firma Thomas Sabo, que desde su sede central en la localidad bávara de Lauf an der Pegnitz, en el sur de Alemania, tiene presencia en 70 países, entre ellos España.

Anillo Herradura Elyndra plata ennegrecida
Entre los motivos simbólicos figuran el caballo y el ojo. “El caballo es el líder de la colección, porque ofrece ese lado western, vaquero y bohemio que impregna toda la colección, aunque esta siga siendo a la vez muy clásica y elegante. La cabeza del caballo representa coraje, poder, libertad, la idea de ‘corro al galope, sigo adelante, estoy decidida’, porque para mí es importante que todas estas piezas estén ahí para hacer que las mujeres se sientan fuertes y hermosas con ellas”, argumenta Aurore Melot.
¿Y el ojo? “En nuestro caso, tiene dos explicaciones: el ojo es un símbolo de protección en muchas civilizaciones y culturas, así que damos la idea de tener el ojo como protección del exterior, pero también es una forma de introspección, de mirar dentro de nosotros mismos para encontrar nuestra mejor versión”.

Aurore Melot recaba ideas en sus viajes, en este caso al Gran Cañón del Colorado y a México
Aurore Melot es directora creativa de Thomas Sabo desde octubre del 2021, pero está vinculada a la firma desde el 2016. Tras estos años, es ya factible discernir las aportaciones mutuas de directora y marca. “El propio Thomas Sabo me dio la gran oportunidad de ser su directora creativa, y desde el principio me dio mucha libertad para crear piezas que me inspiran y me gustan. He ido aprendiendo también cosas de su experiencia personal, de la empresa y también de toda la gente que me rodea –reflexiona Melot-. Por mi parte, creo que lo que he aportado ha sido quizás un soplo de aire fresco: creatividad, color, forma, inspiración. Y como soy francesa también contribuyo a que seamos una marca internacional”.