Aunque algunas zonas parecen resistirse, el frío ha llegado a gran parte del país. Con él, las ganas de borrar la playa de los planes y hacer alguna que otra escapada a la montaña. ¿Y qué mejor que hacerlo cuando se dispone de una propiedad en un enclave privilegiado? Risto Mejide es uno de esos afortunados, y gracias a él –y a su exmujer Laura Escanes, siempre activa en las redes sociales– hemos podido descubrir con el tiempo cómo es ese remanso de paz del que el presentador de Todo es mentira dispone en el Pirineo catalán.
En la Cerdanya, el publicista y escritor encuentra un rincón fuera del ruido habitual, donde el blanco de la pared se encuentra con el verde del bosque, y donde la geometría moderna se entrelaza con la madera y la piedra propias del estilo alpino. Allí se alza su casa de montaña, concebida para el descanso, el sosiego y las vistas sin interrupción.
Una pieza de lo más original
Chimenea de diseño y salón panorámico
En el salón de la vivienda destaca una chimenea empotrada en una pared gruesa de blanco, dispuesta junto a una cristalera que abre el espacio hacia el exterior. Un taburete forrado, una gran lámpara de diseño, un sofá claro con cojines en tonos oscuros: el ambiente combina lo rústico con lo contemporáneo. Este rincón está concebido para recogerse cuando baja el mercurio, pero seguir contemplando el paisaje sin moverse del sofá.
La chimenea empotrada.
Grandes ventanales y vigas vistas completan el diseño interior, mientras un piano negro se sitúa frente a uno de esos ventanales, permitiendo que la música encuentre su eco en el verde del Pirineo. El salón, además, cuenta con varias zonas –una para el sofá, otra para el piano y otra para el comedor– lo que permite a sus ocupantes estar juntos aunque estén haciendo cosas distintas.
El rincón del piano tiene vista directa al exterior.
Biblioteca a dos alturas
Una oda al libro, en la residencia de un escritor
La vivienda alberga una estancia de lo más singular. Se trata de una biblioteca que ocupa una pared entera, con estanterías negras que llegan hasta el techo y un altillo accesible mediante escalera. Para el autor y escritor que es Mejide –once títulos publicados hasta 2024– esta biblioteca responde a una necesidad real, no solo decorativa. El espacio combina la reverencia por el libro con la arquitectura de casa de montaña.
Vigas que se dejan ver, lámparas colgantes de diseño moderno y una atmósfera de estudio intelectual sin perder el acento rural. Allí, uno imagina al que fuera jurado de Operación Triunfo subiendo por la escalera metálica, alcanzando un volumen más escondido y dejando que la calma del entorno entre por las ventanas altas. Esa dualidad entre la lectura tranquila y la naturaleza próxima, que define buena parte del carácter de esta vivienda.
Paraíso al aire libre
Exterior, vistas y la joya de la piscina infinita
El exterior no se queda al margen del disfrute. La casa, de tres pisos, dispone de varias zonas de terraza. Sofás de fibras con cojines blancos, mesas de centro de madera, sillas de madera para desayunos al aire libre y un comedor exterior completo para convivir bajo los cielos del Pirineo. Y, sin duda, la joya del jardín: una piscina tipo infinity que parece fundirse en el horizonte y que se ubica en un entorno de césped, árboles y senderos que invitan a desconectar.
En épocas de calor, Risto disfruta de su piscina infinita.
Las vistas sobre la comarca de la Cerdanya se convierten en el gran lujo de la casa. En invierno la nieve cubre el jardín, en verano el verde domina y las montañas rodean el escenario. La combinación de diseño, comodidad y panorámica elevada que convierte la residencia en el refugio perfecto para una pausa real.
