Aquel que está obsesionado con el pasado es alguien que en el presente, sigue sin resolver sus problemas. Desde luego, ese no es Marc Márquez. Tras un calvario de cuatro largos años, al de Cervera le sirve de poco anclarse en polémicas y rivalidades de antaño. Ha vuelto a recuperar su tan característica sonrisa y lo más importante, a sentirse rápido y... feliz. Algo que le ha llevado a lo más alto del podio este 2025.
El piloto de Ducati estuvo en El Larguero de la Cadena SER donde hizo balance de esta temporada de MotoGP que, pese a concluirla con una lesión —sin demasiada gravedad—, ha sido el año donde el '93' se convirtió, por séptima vez, en campeón del mundo de la categoría reina y el noveno en su casillero dentro del motociclismo.
Marc Márquez
“Yo no le necesito, él a mí tampoco, pero el motociclismo nos necesita a los dos”
Sobre su relación con Il Dottore, Márquez fue claro y reconoció que la cordialidad entre ambos nunca se recuperó tras su enfrentamiento en Malasia en 2015.
“No nos hemos vuelto a ver, nos hemos cruzado alguna vez en los circuitos, creo que fue en Austria, pero sin más. Ni sientes ni padeces. ¿Si nos saludaríamos cordialmente? Pues no, no te puedo mentir tampoco. Cada uno hace la suya. Él no me necesita a mí. Yo no le necesito a él. Pero el motociclismo nos necesita a los dos”, explicó Márquez, dejando que la frialdad entre él y Valentino Rossi seguirá existiendo.
Marc Márquez en 'El Larguero'
Sin embargo, jamás pensó que su rival por el título hubiera sido aquel que siempre ha estado ahí todos estos años: su hermano. Recientemente, Álex Márquez se proclamó subcampeón del mundo de MotoGP, pero en el primer tercio de la temporada lideró la clasificación por momentos, pese a tener la Ducati GP24, al estar en el equipo Gresini y no en el oficial.
“Si este año no ha cambiado la relación, no va a cambiar nada. Este año ha sido el primero que realmente hemos competido por lo mismo y nos ha unido más que nunca”, señaló. Los dos sellaron y mantuvieron un acuerdo: competir al máximo sin que la rivalidad afectara su vínculo familiar. “Nos dimos la mano y ya está”, dijo Marc.
Marc Márquez celebrando el título
El piloto también habló de su recuperación física y de las secuelas de sus graves lesiones. Desde la caída en el GP de Jerez de 2020 hasta la actualidad, Márquez ha pasado por un sinfín de operaciones, especialmente en su brazo derecho, donde lleva “unos 20 tornillos, más o menos, no sé si 18 o 22”, según contó.
“Mi trabajo y el de mis doctores es, sin importar lo que tenga dentro, trabajar más que nunca para que se hable de mis resultados y no de mi brazo” sentenció Marc.

