El año 2025 ha resultado favorable para Pablo López. No solo se reincorpora al grupo de mentores de La Voz, que esta noche presenta en Antena 3 la penúltima fase de su undécima temporada, sino que también ha culminado uno de los hitos personales más significativos de su trayectoria. Tras la sobria ceremonia religiosa efectuada en Madrid en julio, el artista de Tu enemigo y su compañera sentimental celebraron un segundo enlace en la serranía gaditana. Una reunión de mayor envergadura, repleta de referencias andaluzas y meticulosamente planeada para que allegados y conocidos disfrutaran de una velada que dio inicio al anochecer.
El festejo se efectuó el 20 de septiembre en un entorno que aparenta estar hecho para instantes únicos: la propiedad La Casería de Tomillos, situada en Alcalá del Valle. En ese lugar, ya entrada la noche, el dúo se detuvo un instante para las cámaras antes de regresar al ágape, transportados por una camioneta hacia el interior del predio. Ella lució un atuendo estilo sirena con detalles de encaje floral y un tocado de flores; él, un traje oscuro. Con sonrisas discretas y algún ademán reservado, la recién estrenada esposa confesó: “Me da vergüenza”. Una estampa sobria previo a una celebración que congregó a más de 300 asistentes, los cuales, por voluntad explícita de los novios, dejaron sus dispositivos móviles al ingresar.
Un enclave histórico
La propiedad del siglo XVI que fue el sitio de su unión civil
Ubicada entre la Serranía de Ronda y la campiña gaditana, La Casería de Tomillos es una edificación defensiva del siglo XVI que abarca aproximadamente 2.500 metros cuadrados. Su propietario, John Byrne, llevó a cabo su restauración entre 1999 y 2008, devolviendo a la propiedad su magnificencia inicial mediante métodos artesanales y logrando en 2009 el premio Europa Nostra por su notable restauración de patrimonio. El complejo consta de patios, zonas ajardinadas, diversas estancias y una capilla antigua, además de áreas acondicionadas para celebraciones y eventos al aire libre.
El paisaje natural constituyó otra razón fundamental para que la pareja optara por esta localización. La propiedad se asienta rodeada de amplias extensiones de terreno y próxima a yacimientos de la Edad de los Metales, que albergan dólmenes y un menhir singular en la comarca. Alcalá del Valle, con una población de 5.000 y edificaciones de herencia árabe, respaldó la noticia a través de su consistorio, el cual manifestó su satisfacción por el evento. El desplazamiento de los asistentes se coordinó mediante autobuses, y alrededor de veinte de ellos tuvieron la oportunidad de alojarse en la finca, mientras que los demás se distribuyeron en hospedajes del propio pueblo y de municipios aledaños como Ronda o Málaga.
En La Casería de Tomillos se encuentra también un centro de bienestar operado por Nooredel, el cual ofrece retiros holísticos bajo la guía del instructor Soroush Shouri. Esta adición demuestra la adaptabilidad de un lugar que fusiona historia, entorno natural y servicios enfocados en el bienestar individual, posicionando la propiedad como un sitio excepcional para la celebración de eventos en el área.
Un relato que nació en el plató de rodaje
Ocho años después de su participación en ‘La Voz Kids’, un romance se ha consolidado.
La conexión entre ellos se inició en 2017, durante la quinta temporada del programa de música de Antena 3, donde Pablo continúa desempeñando sus funciones. Laura Rubio participó como concursante, mientras que él actuaba como su entrenador. La joven se unió a su grupo, progresó hasta las semifinales y, con el tiempo, esa conexión laboral evolucionó hacia algo más profundo.
Con reserva y sin ostentaciones públicas, comenzaron un noviazgo que se hizo público de forma fortuita en 2020, al irrumpir inesperadamente en una transmisión en vivo del artista desde su hogar. Después de un corto periodo de dificultades en 2021 y un reencuentro en 2022, su vínculo prosiguió de manera firme. Se les observó nuevamente unidos en el Santiago Bernabéu, durante la ceremonia de entrega de la Medalla de Andalucía al músico en 2024 y en eventos como los Goya de 2023.
Pablo López y Laura Rubia en el Mutua Madrid Open de 2025.
Ella, quien ha colaborado como vocalista de apoyo en espectáculos y conciertos al lado de otros intérpretes, conserva un perfil discreto y sin presencia en redes sociales abiertas, mientras él conserva su esfera personal al margen de su exposición pública. Este otoño, de esta manera, concluyeron un trayecto de casi ocho años que se inició bajo los reflectores y que ahora finaliza en un ambiente privado, alejado de los objetivos, en pleno corazón de la sierra de Cádiz. La celebración que deseaban. La celebración para atesorar.
