Una madre, un hijo y un reencuentro que lo dice todo sin palabras. Así podría resumirse el momento que ha compartido recientemente la terapeuta holística Laura (@aura_wellness_trainer), en el que una perra y su cachorro se reencuentran tras años sin verse, después de haber sido adoptados por familias distintas.
Una madre, un hijo y un reencuentro que lo dice todo sin palabras. Así podría resumirse el momento que ha compartido recientemente la terapeuta holística Laura (@aura_wellness_trainer), en el que una perra y su cachorro se reencuentran tras años sin verse, después de haber sido adoptados por familias distintas.
“Estas cosas me hacen llorar”, escribió Fernández al compartir las imágenes. Aunque no es la autora original del vídeo, quiso dar visibilidad a un momento que dice mucho sobre lo que sienten los perros y cómo recuerdan.
No se han detallado el lugar ni la fecha exacta del reencuentro, pero la historia vuelve a poner sobre la mesa la cuestión de las adopciones múltiples en camadas. Muchos hermanos, e incluso madres y crías, son separados sin posibilidad de reencontrarse, y casos como el de Milo y su madre abren una puerta a la reflexión.
Porque el amor no entiende de especies. Esta escena entre una madre y su cría demuestra que la memoria emocional también late en cuatro patas, que el vínculo familiar puede resistir al tiempo, a la distancia y a la ausencia, y que hay reencuentros que lo dicen todo sin necesidad de palabras.