Drake no necesita a nadie para encontrar lo que busca. Este golden retriever explora la orilla con el mismo método cada día: se acerca al agua, la analiza y se lanza. Su rutina se ha vuelto tan eficaz que ha conseguido desarrollar una habilidad poco habitual para su especie. Mientras algunos perros corren detrás de pelotas o se entretienen con palos, él ha perfeccionado su técnica para detectar, extraer y abrir almejas en la playa.
Lo primero que hace, según muestran sus dueños en un vídeo compartido en redes, es recorrer la zona y observar si la marea ha bajado lo suficiente. Si aún no lo ha hecho, espera en los bordes, metido en el agua y atento a cualquier cambio.
Perro experto
Drake repite el mismo procedimiento cada vez que va a la playa
Cuando el nivel del mar ya le permite actuar, comienza a buscar con esmero. Con las patas va palpando la arena del fondo, mientras bucea con la cabeza sumergida. La claridad del agua facilita el proceso y le permite ver y tocar al mismo tiempo.
Una vez localiza una almeja, la atrapa con la boca y nada hasta tierra firme. Al llegar al muelle donde suele dejar sus hallazgos, coloca la pieza entre las patas y la muerde con insistencia hasta que logra abrirla. En las imágenes también se puede ver cómo otro perro se acerca para intentar llevarse su captura.
El comportamiento de este perro ha llamado la atención de muchos usuarios que han visto el vídeo. Algunos lo describen como un auténtico experto, mientras otros comparan a sus propios animales con cierto tono resignado. Entre los comentarios más repetidos hay uno que resume esa sensación con una frase sencilla: “Mi perro ni siquiera es capaz de mirar a donde le señalo”.
Este tipo de reacciones ha convertido a Drake en una figura peculiar entre quienes siguen contenidos de animales. Más allá del entretenimiento, el interés que despierta tiene que ver con su capacidad de repetir una acción concreta con eficacia, sin ayuda humana y en un entorno cambiante como el mar.