¿Es legal que prohíban la entrada en garajes a coches eléctricos e híbridos por motivos de seguridad?
Algunos aparcamientos de Madrid han comenzado a vetar la entrada de vehículos electrificados tras el incendio de un coche de esta tecnología en un parking de Alcorcón
Rafael Moro, exjefe de Bomberos: “Aparcar coches eléctricos en parkings privados se irá prohibiendo; un incendio puede afectar a la estructura del edificio”

Un coche entra en el aparcamiento de una terminal de aeropuerto
Al menos dos aparcamientos privados de Madrid, uno en la calle Relatores y otro en la plaza de Jacinto Benavente, han comenzado a vetar la entrada de coches eléctricos e híbridos. Alegan motivos de seguridad tras el incendio que costó la vida a dos bomberos en un garaje de Alcorcón donde ardió un vehículo de este tipo a principios de este mes de abril. La medida ha generado dudas sobre su encaje legal y ha reabierto el debate sobre los riesgos asociados a este tipo de vehículos en espacios cerrados.
Aunque no existe ninguna norma estatal o municipal que impida su acceso a garajes, los propietarios de aparcamientos privados pueden establecer condiciones de uso, siempre que estén debidamente señalizadas y no vulneren derechos fundamentales. “Es cuestión de seguridad. Se trata de salvaguardar la seguridad de todos, tanto de los clientes como de los empleados de los aparcamientos, y del resto de vehículos estacionados”, admiten fuentes de Amega, el gremio de garajistas de Madrid.
En su defensa, recuerdan que en Madrid se han producido al menos tres incendios de coches eléctricos en aparcamientos desde diciembre, todos ellos en el centro de la ciudad. A estos se suma el del pasado 1 de abril en un garaje de Alcorcón, donde perdieron la vida dos bomberos. En este caso, el vehículo implicado era un Porsche Taycan 100 % eléctrico, con una batería de litio que se recarga conectándola a la red.
Los garajistas alegan motivos de seguridad para respaldar su derecho de admisión
Por eso, desde el sector insisten en que más que hablar de eléctricos convendría hablar de enchufables. Comparten el mismo tipo de batería y, por tanto, los mismos riesgos potenciales en caso de fallo. Aunque las cifras no indican una mayor frecuencia de incendios en este tipo de vehículos, su extinción es más compleja, y esto pone en tensión los protocolos de seguridad de muchos garajes que no están preparados para este escenario.
Responsabilidad compartida
Desde Amega consideran que no se puede cargar toda la responsabilidad sobre los gestores de los aparcamientos. “Aquí tienen que intervenir muchos actores: los fabricantes, para garantizar baterías más seguras; las autoridades, para establecer regulaciones claras; y también los servicios de emergencia, que necesitan protocolos adaptados”, apuntan. Recuerdan además que no se trata solo de garajes, ya que también han ardido barcos de carga transportando vehículos eléctricos. Y ponen como ejemplo países como Alemania o Noruega, donde este tipo de coches no pueden acceder a algunos aparcamientos públicos subterráneos por razones de seguridad.

Una opinión similar expresa Rafael Moro, expresidente de Bomberos y Protección Civil de Alcorcón y actual presidente de la Asociación Española Contra el Fuego (ASELF). En declaraciones Versió RAC1, advirtió que “aparcar coches eléctricos en parkings privados se irá prohibiendo. Un incendio puede afectar a la estructura del edificio”.
En los últimos meses, han ocurrido al menos tres incendios de coches eléctricos en Madrid y el último, en Alcorcón, costó la vida a dos bomberos
Según Moro, el problema no es solo la posibilidad de que ardan, sino las consecuencias que tiene este tipo de fuego: “Hoy por hoy, todavía no sabemos cómo se comporta una batería de litio, lo que sí sabemos es el efecto que tiene en un incendio en las propias baterías. Provoca mucho humo, altas temperaturas y genera un fuego que no se apaga”.
Uno de los protocolos que aplican los bomberos para extinguir el fuego en un coche eléctrico es cubrirlo con una manta térmica que admiten hasta 1.600 grados de temperatura. De este modo se evita que el fuego se propague mientras la batería se va consumiendo por completo.

¿Se incendian más los coches eléctricos que los de combustión?
El trágico desenlace del incendio ocurrido en Alcorcón volvió a poner el foco en la seguridad de los coches eléctricos y enchufables, en comparación con los de combustión. La notoriedad del caso hace pensar que los vehículos eléctricos son más peligrosos, pero los datos cuentan una historia diferente.
Según estudios de la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA) -el equivalente a la DGT en Estados Unidos- y la Agencia Sueca de Contingencias Civiles (MSB), los incendios en coches eléctricos no son más frecuentes que en los de combustión, e incluso la mejora en las baterías ha reducido el riesgo.
Por su parte, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) afirma que “un coche con motor de combustión diésel o gasolina, que son combustibles altamente inflamables, tiene un riesgo 10 veces mayor de empezar a arder que un coche eléctrico”. Este dato se basa en estudios realizados en los países nórdicos, Australia y Estados Unidos, donde el parque de vehículos eléctricos es más elevado que en España.