Diversas organizaciones conservacionistas europeas han denunciado la llegada a España de madera ilegal de Rusia, pese al embargo decretado en 2022 por la UE a las importaciones de este país tras invadir Ucrania. Además, la preocupación crece ante la posibilidad de que se modifique el reglamento europeo de deforestación importada. Esto podría debilitar aún más esta normativa y perpetuar la importación de madera ilegal de Rusia, que se blanquea gracias la intermediación de países terceros.
Varios países de la UE sirven de punto de entrada de la madera rusa y bielorrusa, pese a las sanciones. Así lo reveló una reciente investigación de la organización británica Earthsight. El embargo a Rusia es blanqueado en países terceros, que hacen de puente de estas importaciones.
Madera de abedul ruso es importada por una empresa vasca a través de China para sortear las sanciones a Rusia
Reetiquetaban y reenvasan la madera rusa en Turquía, Georgia, Kazajistán o China con certificados de origen falsificados. Luego, estos productos entran en países como España aprovechando controles débiles, y esquivan las sanciones. La UE ha importado más de 1.500 millones de euros en madera de abedul rusa y bielorrusa ilegal desde 2022 y España uno de los destinos más habituales (con importaciones cifradas en 145 millones).
Una empresa vasca recibió 54 envíos de contrachapado de abedul de una empresa china, denuncia Earthsight. Las autoridades competentes del Ministerio para la Transición Ecológica la están investigando.
El riesgo de debilitar el reglamento contra la deforestación importada
Diversas organizaciones ciudadanas temen que este fraude se pueda perpetuar si el reglamento europeo (con valor de ley) de deforestación importada (que entrara en vigor en enero de 2026) es modificado y se debilitan los controles previstos.
Y, en cualquier caso, lo que está ocurriendo demuestra de manera palpable los efectos negativos que está teniendo el retraso en su aplicación.
“Si el reglamento hubiera estado ya en funcionamiento, la entrada de la madera rusa ilegal hubiera sido mucho más difícil”, dice Isabel Fernández, consultora de Mighty Earth.
Las actuales exigencias
El reglamento europeo aprobado establece que los importadores de madera deben presentar geolocalizador, demostrar que el origen no es una zona donde haya deforestación y que no se han vulnerado las leyes del país; y, además, las importaciones estarán sometidas a controles (el 1% sobre la documentación exigida, y puede también implicar un control físico o que la mercancía se retenga en la aduana si existen dudas).
Pero dados sus precedentes, un grupo de países son considerados de “alto riesgo” de deforestación (Rusia, Bielorrusia, Korea y Myammar), y por eso las importaciones deben ser sometidos a controles aún más exigentes.

Un transportista carga troncos en la planta de tala del holding maderero Segezha Group en Vólogda
Los efectos del debilitamiento del reglamento
El problema, denuncian estas entidades, es que varios países quieren introducir la categoría de países con “riesgo cero o sin riesgo” de deforestación, con lo cual querían libres de esos controles. Si se aprobase la categoría “sin riesgo o riesgo cero” las empresas no tendrán que presentar geolocalizacion y tampoco habrá controles por ley por parte de las autoridades competentes.
El efecto más temido es que reciban la catalogación de “riesgo cero” países que están haciendo ahora de puente de contrabando para sortear el embargo de Rusia, con lo cual, definitivamente se convertirían en intermediarios para dar salida a la madera ilegal de Rusia o Bielorrusia. Entre los países “blanqueadores” están China, Turquía o Kazajistán.
“Si se cambia el reglamento, se perpetuarían estas ilegalidades.Los países considerados sin riesgo harían de intermediarios y se perdería la trazabilidad de madera importada”, dice Fernández. Si estos países pasan de ser “de bajo riesgo” a de “riesgo cero” no se harían los controles previstos (geolocalización, trazabilidad y garantías de que no se han cumplido los derechos laborales o de acceso a la tierra por parte de pueblos indígenas).
“Si hubiera entrado ya en vigor el reglamento, la empresa vasca que importó el contrachapado se hubiera visto obligada a presentar documentos que hubieran desmentido que la madera procedía de China”, reitera la consultora.
“Es importante recordar que, según los criterios de quienes promueven esta nueva categoría, China sería considerada de ‘riesgo cero’. Por eso los fabricantes europeos de madera nos dicen que esto es un desastre: seguirían compitiendo con productos rusos blanqueados a través de China. La categoría de ‘riesgo cero’ no solo debilita la regulación: hace saltar por los aires las sanciones europeas contra Rusia”, dice Hannah Mowat, responsable de campañas de Consumo Sostenible y Producción en Fern, oenegé dedicada a proteger los bosques.

Talas en Rusia
Presión de países para evitar los controles
Evitar que siga entrando madera
Los expertos alertan de que muchos de los países que promueven la creación de una categoría de países “de riesgo cero” o “sin riesgo” de deforestación (lo que libraría a los importadores de todo tipo de controles) han importado históricamente grandes volúmenes de madera sospechosa. El análisis de Earthsight muestra que los 18 Estados miembros de la UE que respaldan actualmente esta exención han importado colectivamente 1.470 millones de euros en contrachapado de abedul sospechoso desde mediados de 2022, lo que representa el 80% de todas las importaciones de este tipo en la UE.
Se trata de un grupo que incluye a algunos de los mayores importadores de madera conflictiva de la UE.
Las investigaciones de Earthsight han revelado que los contrabandistas han identificado varios de estos países como puertas de entrada preferentes para la madera rusa o bielorrusa. El 9 de julio, el Parlamento Europeo aprobó un resolución no vinculante para introducir esa categoría.
Las organizaciones alertan que otorgar el estatus de “riesgo cero” a este grupo crearía una enorme laguna legal y facilitaría aún más la entrada de madera blanqueada al mercado europeo pese a las sanciones.
Tara Ganesh, de Earthsight
“Si la UE no mantiene el reglamento intacto y bien aplicado, será cómplice de esos daños”
“La categoría de 'riesgo cero' propuesta está demostrando no ser tal. No solo amenaza el espíritu de la ley sobre deforestación en la UE y más allá, sino que también implica que España y Europa no cumplirán sus compromisos en materia de sanciones a Rusia. Cualquier debilitamiento de los mecanismos de control frente al comercio ilegal es una amenaza grave para los bosques europeos y globales.”, dice Jaume Grau López, portavoz de Ecologistas en Acción en materia de biodiversidad.
“El continuo flujo de madera ilegal no solo daña el clima, sino que llena los bolsillos de quienes promueven la guerra y perjudica a las empresas europeas. Si la UE no mantiene el reglamento intacto y bien aplicado, será cómplice de esos daños. Proponer una laguna legal de este tamaño es un verdadero golpe bajo a nuestro apoyo a Ucrania”, señala Tara Ganesh, de Earthsight.