Tim Wu es uno de los más importantes expertos en derecho digital del mundo, siendo asesor de la Casa Blanca durante el mandato de Joe Biden en materia de tecnología y competencia. Ahora, como profesor en de Derecho en la Universidad de Columbia, lleva unos años manteniéndose al margen del debate, pero ha vuelto a nuevo a los focos en el lanzamiento de su nuevo libro.
The Age of Extraction: How Tech Platforms Conquered the Economy and Threaten Our Future Prosperity es un libro en el que Tim Wu plantea cómo las grandes tecnológicas pasaron de ser un servicio para los usuarios a servirse por completo de ellos.
Parafraseando al ingeniero computacional Pedro Mujica, “El capitalismo ha fracasado, ahora vivimos en el tecnofeudalismo: las grandes corporaciones nos tratan como vasallos digitales”. Y eso es precisamente lo que defiende Wu en su publicación, analizando cómo compañías como Amazon, Google, Apple o Meta han aprendido a obtener valor no tanto creando productos o servicios nuevos, sino capturando rentas de los ecosistemas que controlan.
“Corremos el riesgo de que las tecnologías contribuyan a la división y el resentimiento, que son la lacra de nuestra época”, advierte Wu en el libro, tal y como recoge Wired. “Cuando un usuario se acostumbra a una aplicación o a un ecosistema digital, cambia su conducta sin darse cuenta. Ese hábito se convierte en el activo más valioso para las empresas, que extraen valor de él a través de comisiones, publicidad o condiciones ocultas para los desarrolladores”.
Corremos el riesgo de que las tecnologías contribuyan a la división y el resentimiento, que son la lacra de nuestra época
No es la primera vez que Wu denuncia algo así. En The Master Switch (2010) analizó cómo la concentración en sectores como la radio, el cine o las telecomunicaciones acabó sofocando la innovación y la libertad de expresión. En The Attention Merchants (2016) denunció cómo el capitalismo digital había convertido la atención humana en mercancía. Y en The Age of Extraction cierra una trilogía sobre el poder tecnológico, pero con un enfoque más abiertamente político: la defensa de un capitalismo competitivo frente a lo que denomina “la monarquía del monopolio”.
Wu propone recuperar la ambición regulatoria que caracterizó a Estados Unidos en otros momentos de su historia. Recuerda cómo la ruptura de monopolios como AT&T o Standard Oil generó un nuevo ciclo de innovación y prosperidad. “La concentración de poder económico no solo daña a los consumidores; también empobrece a la democracia”, advierte. Su receta pasa por reforzar las leyes antimonopolio, promover la interoperabilidad de plataformas y garantizar que las infraestructuras digitales funcionen como bienes públicos.


