Por mucho que corran las lanchas de los narcos, al final les acaban atrapando. Algo parecido sucede con los hackers que ocultan su identidad con mil y un filtros de anonimización: el rastro se acaba encontrando y la policía puede dar con el delincuente.
Esto es lo que ha pasado hace pocas semanas en la localidad gerundense de Roses, donde una operación conjunta de Mossos d'Esquadra y la Policía Nacional ha dado con el paradero de un joven que, presuntamente, sería el responsable de varios ciberataques a entidades como bancos, universidades e incluso una autoescuela.
Esta semana, los Mossos han dado a conocer la detención que practicaron el 16 de julio en el domicilio particular del hombre, que sería su centro de operaciones. El investigado poseía profundos conocimientos de informática, con los que presuntamente consiguió configurar un complejo entramado tecnológico mediante el uso de aplicaciones anónimas que le permitían ocultar su huella y dificultar su identificación.
La investigación, iniciada en mayo de 2024, surgió al detectarse en un foro especializado en filtración de datos una publicación en la que el ahora detenido manifestaba estar en posesión de datos provenientes de bancos españoles, una autoescuela y una universidad pública, entre otros. Posteriormente, el propio individuo reivindicaba, en el mismo foro, la filtración de la base de datos de clientes de una empresa de fontanería y saneamientos de Barcelona.

Agentes de Mossos y de la Policía Nacional registran el domicilio del presunto delincuente.
Tras un laborioso trabajo de desanonimización, se localizó el domicilio desde el que se habían llevado a cabo los ataques reivindicados por el autor, en la localidad de Roses (Girona). Gestiones e investigaciones posteriores permitieron identificar a los habitantes de la vivienda, entre ellos un hombre joven que, por aquel entonces, estaba cursando estudios de informática.
Durante la entrada y registro se intervinieron diferentes dispositivos, entre los que se encontraba un ordenador portátil, una decena de móviles, varios discos duros, más de una treintena de tarjetas SIM y varias tarjetas bancarias a nombre de distintos titulares.
El presunto autor fue detenido y puesto a disposición del juzgado de guardia de Figueres (Girona) por un delito de descubrimiento y revelación de secretos. Ahora la investigación se va a centrar en intentar esclarecer todas las estafas derivadas de los robos y filtraciones de datos que habría perpetrado el detenido.