La carrera espacial es una lucha intrínseca que lleva presente muchos años entre Oriente y Occidente. No obstante, los últimos años han provocado que China se posicione de mejor manera con respecto a Estados Unidos en la lucha por volver a la superficie lunar.
Desde que Donald Trump fuese reelegido como presidente de Estados Unidos, la NASA no ha nombrado a ningún director a largo plazo. Esta situación, unida a la inestabilidad económica y las dificultades por cumplir plazos de la agencia americana, dejan un futuro incierto en misiones espaciales.
Por su parte, China dio un nuevo impulso a su programa lunar al probar con éxito el módulo de alunizaje “Lanyue” en las afueras de Pekín. Fue el primer ensayo de despegue y aterrizaje espacial tripulado realizado por el país.

Astronauta china mirando el espacio.
China, por delante de Estados Unidos
La meta de China es llevar astronautas a la Luna antes de 2030 -aunque esta fecha puede posponerse-. Con esto, Pekín marca su propio ritmo frente a Estados Unidos, que prevé su misión Artemis 3 no antes de 2027.
”Al ritmo que van las cosas, lamentablemente, parece bastante probable que los chinos aterricen en la Luna antes de que la NASA pueda regresar a la Luna”, señaló el analista de política espacial chino Dean Cheng.