Lo primero que hará esta mañana el presidente francés, Emmanuel Macron, en visita de Estado a Vietnam, será rendir homenaje a los vietnamitas caídos en la guerra de independencia contra Francia. Será su primer acto oficial tras llegar ayer tarde a Hanoi, una manera de subrayar hasta qué punto los dos países han cicatrizado las heridas causadas por el pasado colonial. En 2024, Francia fue invitada por primera vez a la conmemoración de la batalla de Dien Bien Phu, que puso fin a la dominación francesa en el sudeste asiático. En la llamada Guerra de Indochina (1946-1954) murieron 47.000 franceses y 45.000 combatientes aliados de la metrópoli, mientras que, por el otro lado, la guerrilla independentista del Viet Minh contabilizó 500.000 muertos.
A diferencia de Argelia, otra excolonia que se independizó también a través de una sangrienta guerra (1954-1962), y con quien las relaciones son tensas, Francia ha logrado reconducirlas con Vietnam, con quien en octubre firmó un acuerdo de asociación.