Españoles, Franco ha muerto; al fiscal lo han matado

CONFUSIÓN VITAL

Isabel Díaz Ayuso y su jefe de gabinete, Miguel Ángel Rodríguez, acostumbran a decir que España va camino de convertirse en una dictadura, si no lo es ya. Y, seamos sinceros, todo lo que ha pasado esta semana lo corrobora. Porque, si no vivimos en una dictadura, mucho se le parece. De ahí que, con muy buen criterio, ayer Ayuso escribiese en inglés en sus redes sociales, para que el mundo entero sepa la situación límite que vive España.

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MARTÍN TOGNOLA

En solo una semana, hemos visto como la UCO de la Guardia Civil ha publicado más datos del hilo del dinero con el que presuntamente el ex secretario de organización del PSOE, Santos Cerdán, y otros miembros de su familia, se han podido enriquecer a base de comisiones. Algo muy habitual en las dictaduras: que una policía estatal actúe contra una persona que fue mano derecha del actual presidente de esa dictadura, Pedro Sánchez.

Al cabo de dos días el Supremo, en una de las resoluciones más rápidas que se le recuerdan a este alto tribunal, ha condenado a Álvaro García Ortiz, fiscal general del Estado, a ser inhabilitado durante dos años. García Ortiz, según lo poco que sabemos, reveló secretos del ciudadano y a la vez novio de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Alberto González Amador, al que tendrá que abonar 10.000 euros y pagar las costas de sus abogados.

Yo le encargaría la sentencia a ChatGPT como si la redactase Díaz Ayuso, y se acabó

Sabemos poco porque la sentencia no está redactada. El tribunal primero ha informado del fallo, en este caso declarar culpable al fiscal general del Estado, y luego ya redactará la sentencia. Es como dar la nota del examen sin demostrar cómo el profesor ha llegado a esa nota. Eso sí, no podemos decir que el veredicto no haya sido justo, porque es justo lo que necesitaban para quitarse de en medio al fiscal general: inhabilitación de dos años y un dinerito. Para qué más, si lo único que querían era sacarlo de circulación en esta dictadura que ya dura demasiado.

Han tenido que cambiar a la jueza que iba a redactar la sentencia, porque es uno de los dos miembros del jurado que no se ha sumado a la condena del fiscal. De siete jueces, cinco han votado a favor de la condena. Dos no. Entonces ahora será otro juez, que haya votado que sí, al que le tocará redactarla. Yo creo que no la ha publicado todavía por pereza. Porque le da palo escribirla. Debe pensar: “Encima ahora quieren saber los motivos, qué pesaos, si lo que queríamos ya lo tenemos”. Yo la sentencia se la encargaría a ChatGPT, dándole las siguientes indicaciones: ChatGPT, escríbeme la sentencia de lo del fiscal como si la redactase Díaz Ayuso. Y se acabó.

Ah, se me olvidaba: tanto la mujer como el hermano de ese dictador acabarán en el banquillo por supuestos casos de corrupción tras ser investigados por fuerzas policiales y jueces que pertenecen a ese mismo Estado dictatorial.

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Presunto inocente

Jordi Évole
opi 3 del 15 novembre

En las democracias se está poniendo en duda la separación de poderes. En las dictaduras, como ven, no. En las dictaduras, la separación de poderes es absoluta. Por eso no podemos extrañarnos que tantos jóvenes y no tan jóvenes prefieran, 50 años después de la muerte del Generalísimo Francisco Franco, una dictadura. Sobre todo cuando escuchan llenarse la boca de democracia y libertad a gente que no movió ni un dedo ni por la democracia ni por la libertad. Mi temor es que dentro de cincuenta años empecemos a escuchar cosas del estilo “con el sanchismo se vivía mejor”. Los típicos nostálgicos. Espero que Sánchez no haga como otros y lo deje todo atado y bien atado. Y me da pavor pensar que convoque elecciones, y que pueda volver a formar gobierno. Eso sería el fin de España.

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