* El autor forma parte de la comunidad de lectores de La Vanguardia
He captado esta serie de fotografías para Las Fotos de los Lectores de La Vanguardia en la llamada Plaza de Puerta Cerrada, en el barrio de Palacio del distrito Centro de Madrid. Aquí confluyen diversas vías del casco histórico y castizo de la villa con edificaciones de los siglos XIX y XX, así como también colindando con ella está el palacio de Arzobispal de Madrid, del siglo XVIII.
El nombre de la plaza deriva porque ahí se ubicaba la puerta de la muralla cristiana de Madrid durante la Edad Media, la más importante en la ciudad medieval después de la de Guadalajara, hasta el año de 1569, en que fue derribada para ensanchar el paso con motivo de la entrada en Madrid de Isabel de Valois, esposa de Felipe II.
El nombre de “cerrada”, aunque anteriormente se denominó de la Culebra, debido a tener esculpida en su piedra dicho reptil hasta su derribo, se debe a que por la estrechez de la misma y sus diversas revueltas, los bandoleros se escondían en sus sinuosidades y robaban a los que entraban y salían por ella, por lo que se cerró.

Grafiti en una de las paredes de la plaza.
No obstante, distintos documentos detallan que sí que estuvo cerrada en algunos períodos, pero no así en otros en los que permaneció abierta por diferentes motivos.
A pesar de no existir la puerta, la plaza conserva aún muchos restos del Madrid medieval, ya que en los edificios que dan a ella existen los vestigios de los lienzos más importantes que todavía perduran, como los de los números 4 y 6 de la plaza.

Restos de lienzo de la muralla cristiana entre dos edificios.
La plaza se halla presidida por una cruz de piedra del año 1783. Una de las características principales del recinto son los murales que alberga, algunos del año 1983 durante la alcaldía de Enrique Tierno Galván para enlucir de alguna manera las demoliciones de viviendas del siglo XIX que habían dejado al descubierto sus patios.

Plaza de Puerta Cerrada presidida por la cruz de piedra de 1783 y mural con trampantojo de enredadera cercenado de Alberto Corazón.
Lamentablemente alguno de ellos, del gran artista Alberto Corazón, que representaba un trampantojo de una enredadera en la fachada, ha sido cercenado por otros grafitis superpuestos. Este artista tiene otro mural de frutas al lado del otro espectacular, titulado El Pilar, de la artista mexicana Hilda Palafox, “Poni”, que representa a dos mujeres de distinta raza entrelazadas y espalda con espalda, emblema de la sororidad y la solidaridad entre mujeres y distintas culturas.

Otra perspectiva de la plaza con la cruz y al fondo los murales de Hilda Palafox y Alberto Corazón.

Fachada con el mural “El Pilar” de la artista Hidal Palafox, “Poni”.
Junto al mural de Alberto Corazón mencionado en primer lugar, en una pared, que nos habla, se puede leer, referente a Madrid: “Fui sobre agua edificada mis muros de fuego son”, ya que el propio nombre de Madrid proviene del árabe, Mayrit, que quiere decir zona abundante en aguas, y la muralla cristiana, sus muros, al ser de sílex, al chocar contra ellos las puntas de las flechas se producían chispas.

Inscripción sobre la pared: “Fui sobre agua edificada, mis muros de fuego son”.
Por último, comentar que allí se encuentra, como así lo indica una placa en una pared, el lugar donde nació en 1642 el pintor Claudio Coello.

Casa con placa en la que se indica que en ese lugar nación en 1642 el pintor Claudio Coello.
¡Participa!
¿Quieres mostrar tus fotografías?
Los interesados en participar en Las Fotos de los Lectores tan solo deben escribir un email a la dirección de correo de nuestra sección de Participación ([email protected]) adjuntando la fotografía, explicando detalles de cómo y dónde fue tomada y aportando los datos del autor para la firma de la imagen. Es importante indicar en el asunto del correo: ´Fotos de los Lectores´.