Las fiestas de Santa Tecla alcanzan su punto álgido: estas son las actividades más destacadas
En Tarragona
La fiesta mayor se agiganta, rompe fronteras y suma adeptos de fuera que redescubren los encantos de una ciudad a salvo por ahora de la gentrificación
La Baixada de l’Àliga, la medianoche de este domingo, es uno de los actos más multitudinarios de Santa Tecla
El verano y su ambiente distendido, antídoto ante la rutina del curso, se alarga en Tarragona hasta que acaba Santa Tecla. Es tradición inamovible. Su fiesta mayor es casi religión para los tarraconenses, que se guardan algunos días de vacaciones para disfrutar más de los festejos en honor a su patrona. Son casi 500 actos repartidos en trece días de fiestas. Una mezcla de tradición, ritual y estallido popular en calles y plazas que en los últimos años ha atraído a muchos visitantes de fuera.
Con Barcelona más masificada que nunca, ciudades de tamaño medio como Tarragona, aún en gran parte a salvo de la gentrificación, se han convertido en escenario casi perfecto para despedir el verano. Casi siempre hace buen tiempo en el litoral tarraconense, con muchos días de sol y una climatología suave. Visca Santa Tecla.
Casi 500 actos y 13 días seguidos que mezclan tradición, ritual y estallido popular en la Part Alta, gran escenario
Con la llegada del segundo fin de semana de fiestas arrancan, hoy, los últimos seis días de Santa Tecla, los más grandes. Un compendio de los actos más esperados, ideales para quienes quieran sumergirse y descubrir el espíritu de unas fiestas con personalidad propia. La secuencia festiva más potente es siempre la misma: 21, 22 y 23 de septiembre, sea o no fin de semana.
Están las citas más multitudinarias, solo aptas para quienes estén dispuestos a vibrar por las calles de la Part Alta. Hay que marcarse en rojo la Baixada de l’Àliga (medianoche del 21 de septiembre), con miles de jóvenes bailando, saltando y cantando al ritmo de Amparito Roca, el pasodoble de fama mundial convertido en el himno oficioso de Tarragona y las fiestas de Santa Tecla.
Caso aparte la relación entre Amparito Roc a y la ciudad. Cumple 100 años el pasodoble que su creador, el barcelonés Jaume Teixidor, dedicó a una de sus alumnas cuando estaba en Carlet (Ribera Alta) dando clases de música, la pequeña Amparito. Tarragona ha aprovechado el centenario para homenajear a la que es, a la práctica, la banda sonora de las fiestas. Más músicos que nunca congregados en la ciudad para interpretar el pasodoble.
Pilars Caminant, el dia de la Mercè, acto tradicional y seguido
La lista de los imprescindibles de las fiestas es larga. No hay que perderse la imponente Cercavila, con decenas de elementos festivos, ni los Pilars Caminant (24 de septiembre), desafío extraordinario de las cuatro colles castelleres locales. Es un regalo extra en el día de la despedida, coincidiendo siempre con la Mercè. Un pilar de cuatro de cada colla intenta recorrer sin caer y sin apenas detenerse la distancia (500 metros) que separa las escaleras de la catedral de Tarragona, en el Pla de la Seu, y el balcón del Ayuntamiento. Los diez minutos largos que dura cada Pilar Caminant suponen un viaje de emociones que merece la pena vivir al menos una vez en la vida.
El escenario de los actos más tradicionales, las calles, callejuelas y plazas del centro histórico, en la Part Alta, con sus monumentos y restos arqueológicos declarados desde hace 25 años patrimonio mundial de la humanidad por la Unesco.
Santa Tecla esconde también otras actos, menos multitudinarios, de aforo limitado, que la impregnan de carácter. La sátira teatral de Dames i Vells, con su hilarante retrato de la actualidad, tiene una legión de fieles adeptos. Hay que reservar entrada.
Tarragona, una de las ciudades más castelleres de Catalunya, tiene dos diades en las fiestas: la del primer domingo y la del día de Santa Tecla (23 de septiembre). Una oportunidad única para vivir el ambiente de la majestuosa plaza de la Font, con más de 150 metros de longitud, llena a rebosar.
Los Gegants Moros saliendo de la plaza de la Font en el pasacalles
Santa Tecla, como cualquier otra fiesta mayor, programa grandes conciertos gratuitos, en el parque del Francolí, pero la personalidad de las fiestas la marcan los actos impulsados por las entidades locales. Su hiperactividad explica que se programen casi medio millar de actividades. “Es una fiesta mayor muy abierta a la innovación, a generar nuevos espacios y nuevos actos, es lo que hace que el programa esté tan repleto”, destaca el periodista y antropólogo social y cultural tarraconense Guillermo Soler. La Baixada de l’Àliga surgió de forma casi espontánea.
“La parte tradicional es muy potente y vivida”, añade Soler. Él recomienda dos momentos, la Entrada de Músics (22 de septiembre) desde el Portal del Roser hasta la plaza de las Cols, y la Entrada del Braç de Santa Tecla (23/IX) en el Pla de la Seu. “Es un momento mágico, de misterio, con una única lógica, la festiva y ritual”.