Una nana podría llevar ‘The big bang theory’ a los juzgados

Denuncia

Les podría salir caro el uso de ‘Soft Kitty’, la canción infantil que Sheldon necesita cuando está enfermo

Horizontal

Jim Parsons en 'The big bang theory'.

CBS

“El dulce gatito parece una bola de piel. Bonito gatito, duerme gatito, bien bien bien”. Sheldon Cooper es un personaje un tanto peculiar. Por un lado se considera uno de los seres más inteligentes del planeta (y no duda en restregárselo por la cara a sus amigos), pero por otro se comporta como un niño de cinco años cuando está enfermo: siempre necesita escuchar la nana Dulce gatito (Soft Kitty) para acostarse y dormir tranquilo. Pues la broma les podría salir cara en la productora de The big bang theory ahora que las hijas de la autora han presentado una denuncia a los juzgados.

La poetisa Edith Newlin escribió la canción en 1937 y las hijas consideran que nadie las ha compensado económicamente por su uso durante todo este tiempo que se ha utilizado. Apareció por primera vez en un episodio de la primera temporada (The pancake batter anomaly), en el que el público pudo descubrir las necesidades del físico interpretado por Jim Parsons cuando enfermaba. Penny no tenía otra opción que cantarle la canción infantil. Pero el gag tuvo tanto éxito que se ha convertido en una broma recurrente. Desde entonces ha aparecido en siete episodios más, por no hablar de las campañas de marketing y de merchandising que se han lanzado con la letra de Soft Kitty.

Evidentemente la productora Warner Bros, una veterana en estos asuntos, creía tener los papeles en regla. Habían acordado su uso con Willis Music, que había comprado los derechos del libro de canciones infantiles que incluía la de Edith Newlin. Los guionistas, como informan en Deadline, habían querido especialmente Dulce gatito porque les recordaba a su propia infancia pero el problema es que ahora no está claro que Willis Music también tuviera los derechos de todos los usos de la letra.

La demanda prosperará o no en función de los contratos que firmasen Newlin y Laura Pendleton MacCarteney, autora del libro. Si acordaron que no solamente le cedía la letra sino el copyright, que sería lo habitual, entonces The big bang theory no tendría por qué compensar a las hijas Margaret Perry y Ellen Chase. Pero si no fue así, la broma del dulce gatito le podría salir cara a Warner Bros. Al fin y al cabo, The big bang theory es la comedia más seguida del planeta y es una vaca sagrada que da mucho dinero. Sólo hace falta ver los últimos acuerdos de los actores protagonistas, que actualmente están cobrando un millón de dólares por episodio más un porcentaje de los beneficios.

Mostrar comentarios
Cargando siguiente contenido...