‘El centro’ lleva a los espías del CNI español al mundo del thriller
Movistar+
La serie, presentada en el festival de Cádiz, llega a Movistar+ el 9 de octubre

La actriz Elisabet Casanovas, el director David Ulloa y las actrices Elena Martín Gimeno y Clara Segura

Caso Pegasus: más de sesenta líderes independentistas espiados. Teorías conspiranoicas respecto a los atentados de Cambrils y Barcelona del 2017 y, la pasada primavera, la supuesta alerta cibernética –nunca atendida– sobre el apagón eléctrico que paralizó la Península. En todos esos escándalos de portada ha aparecido implicado, de una u otra manera, el Centro Nacional de Inteligencia, el CNI, el principal servicio de inteligencia del Estado español: el gran desconocido.
La serie de acción El centro de Movistar+, que se estrenará el próximo 9 de octubre –y que ha tenido su première en el South Series Internacional Festival, de Cádiz–, tiene como voluntad declarada hacer más próximo y humano un engranaje fundamental de la seguridad como es el CNI. Una institución que “solo aparece en las noticias cuando algo sale mal o es ile- gal”, dice el director de la serie, David Ulloa. “Para el CNI eso son como accidentes de tráfico –añade–. Pero los coches deben seguir circulando. Pase lo que pase”.
La ficción se centra en el día a día de un grupo de agentes del polémico Centro Nacional de Inteligencia
En este sentido, el director se considera un poco espía a sí mismo, por colarse en la intimidad de los miembros del CNI y ponerse a observar, como ellos, sin ser visto. Tiene a Juan Diego Botto como actor principal, junto a Elisabet Casanovas, Elena Martín y Clara Segura, todas ellas presentes en Cádiz. Ellos son los protagonistas de un thriller de espionaje con voluntad realista que explora los desafíos a los que se enfrentan, en su día a día, un grupo de oficiales de inteligencia del CNI.

Como en la mayoría de las tramas de espías, en El centro abundan los momentos de acción, los giros inesperados y sus topos infiltrados. A diferencia de otras propuestas semejantes, ha contado con la colaboración del CNI, por lo que se adentra de una manera desconocida y, aseguran, mucho más realista, en el día a día de los miembros de la comunidad española de espías.
“Me invadió una gran tranquilidad cuando la analista de perfiles, la profiler del CNI, nos dijo, cuando visitamos las instalaciones, que nuestra personalidad, la de cada una de nosotras, se ajustaba perfectamente a nuestros papeles”, bromea Clara Segura, la gran dama del teatro catalán que en este caso encarna a una agente curtida en mil batallas: la jefa de todo eso. Elisabet Casanova, la más joven del grupo, recuerda de esa misma visita al CNI –tampoco tan habituales– la ayuda que recibió para entender su personaje: una especie de becaria en el mundo de los espías. “Que no está ahí para llevar cafés a nadie”, puntualiza. Por su parte, Elena Martín, tras el agotador rodaje de Creatura como directora y protagonista, que tantos reconocimientos le ha valido, no tuvo en ningún momento la tentación de decir “quítate tú para ponerme yo” al director.
El centro procés Cuando una ficción como esta aborda la realidad, hay dos extremos que la pueden marcar. Uno cae del lado de la mistificación: dejar entrever que todo es bueno. El otro extremo sería la crítica despiadada. “Nosotros no nos hemos movido en ninguno de esos parámetros –comenta Ulloa–. Nos interesaban las personas que conforman el CNI. Mostrar, en medio de un complot internacional, pues El centro no deja de ser una serie de espías, cómo esas personas consiguen no perder la cordura en un mundo de medias verdades, desconfianzas y traiciones”.