Fue una persecución impactante en la que un ladrón puso en riesgo la vida de varias personas al subirse con un coche a la acera para escapar de la policía, que le perseguía tras ser pillado en pleno robo.
Ocurrió en San Miguel, Argentina, cuando un asaltante robó un teléfono y escapó en un vehículo robado. Un testigo denunció los hechos a Ojos en Alerta, el programa de seguridad que conecta a los vecinos con el Centro de Operaciones Municipal (COM), y la policía fue hasta el lugar.
En un semáforo
El ladrón se encontraba parado en pleno tráfico cuando escuchó las sirenas de los policías que venían a por él
Cuando el ladrón escuchó la sirena de uno de los patrulleros, estaba detenido en un semáforo, detrás de algunos vehículos y un autobús. Entonces, tomó una arriesgada decisión: se subió a la acera y pasó por el único hueco posible entre una parada de autobuses y la fachada de las casas y los comercios.
En ese lugar, había varias personas caminando, esperando al autobús y entrando y saliendo de los negocios. Al ver que el Fiat Uno blanco se subía a la acera, la gente buscó refugio como pudo.
Gracias a un trabajo conjunto de los operadores de cámaras y los patrulleros, los agentes pudieron detener al ladrón. Al ser alcanzado por la patrulla policial, en la esquina de Estrada y San Juan, en Bella Vista, el ladrón descendió del vehículo en movimiento para emprender la fuga.
Pero, al verse envuelto por los coches de policía, finalmente fue interceptado y detenido. Ya esposado en el coche de policía, el ladrón les dijo a los agentes: “Yo no iba en el coche. Fíjese bien”.


