Un hombre ha sido condenado tras manipular a su hermana con alzhéimer para que hiciera un cambio radical en su testamento y le pusiera a él como único heredero de todo su dinero y bienes. Tras sentarse en el banquillo de los acusados, la Audiencia Provincial ha dejado claro que no recibirá nada del legado de la fallecida. Así se desprende de la información publicada por Menorca.
La Audiencia Provincial ha ratificado la declaración de indignidad de este hombre, quien ya fue condenado por un juzgado de Primera Instancia. El primer fallo anuló el documento que le convertía en el único heredero y repartía la herencia entre el resto de la familia. La mujer fallecida, que poseía un importante patrimonio, murió sin hijos. En un testamento firmado en 1995 nombraba herederos a todos sus hermanos excepto a uno.
Engaño
El hermano de la afectada llevó a la mujer a varios notarios para evitar que se dieran cuenta de que tenía alzhéimer
Sin embargo, la mujer modificó sus últimas voluntades en 2018, y lo hizo de forma radical: el único hermano que hasta el momento había quedado excluido del testamento era ahora el único heredero de todo su patrimonio. Al fallecer la mujer, los sobrinos, quienes tenían derecho a la herencia antes del cambio del testamento de 2018, presentaron una demanda para impugnar el segundo documento.
Tanto el juzgado de Primera Instancia como la Audiencia han considerado demostrado que la mujer padecía un grave deterioro cognitivo en el momento de firmar el segundo testamento y que en ese momento no era apta para poder tomar decisiones sobre sus propios intereses. La mujer había estado ingresada en un hospital hasta un mes antes de firmar el segundo testamento. Presentaba un “síndrome confusional agudo” por el que le terminaron diagnosticando “demencia degenerativa primaria tipo enfermedad de Alzheimer”.
Según la sentencia, este diagnóstico convertía a la mujer en “especialmente susceptible para ser manipulada”. Además, los magistrados han destacado el carácter “autoritario y manipulador” del hermano que se convirtió en heredero debido a los constantes incidentes protagonizados por el hermano que los médicos que trataban a la fallecida relataron.
La sentencia explica que el hermano que manipuló a la fallecido no se había preocupado por su familiar hasta el momento en su estado mental la hizo susceptible de influencia. Por ello, la Audiencia considera que el condenado es indigno de recibir la herencia y que su actuación está recogida como “inmoral” en el derecho foral.


