La Guardia Civil ha detenido a tres personas en Castellón y Valencia como presuntos miembros de un grupo criminal especializado en estafar a empresas del sector logístico en las provincias de Guadalajara, Toledo, Madrid y Barcelona. Las detenciones se enmarcan en la operación Kurume, que ha sido coordinada por el Equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Sigüenza (Guadalajara).
Según ha informado este martes la Comandancia de Guadalajara, la investigación comenzó en septiembre de 2024 tras detectarse dos estafas en empresas de logística de la provincia. Los implicados simulaban ser transportistas de compañías reales para contratar envíos de mercancías de alto valor que, una vez recogidas, nunca llegaban a su destino.
Para evitar ser identificados, los estafadores utilizaban placas de matrícula falsas y documentación falsificada, tanto de vehículos como de empresas, lo que dificultó el avance de las pesquisas. No obstante, la Guardia Civil logró relacionarlos con hechos similares cometidos en Madrid, Toledo y Barcelona, donde el valor de las mercancías sustraídas se aproxima al medio millón de euros.
La operación culminó a finales de julio con tres detenciones en las localidades de Betxí (Castellón) y Godelleta (Valencia), además de dos registros domiciliarios en esta última, donde residía el presunto cabecilla del grupo. En estos registros se incautó documentación relevante, material robado y 11.700 euros en efectivo.
Asimismo, los investigadores localizaron tres semirremolques y una cabeza tractora en una campa de Burriana (Castellón), utilizados por la organización para el transporte y ocultación de la mercancía.
En la operación han colaborado la Unidad de Seguridad Ciudadana (Usecic) de la Comandancia de Valencia y unidades del Servicio de Seguridad Ciudadana de Burriana y Requena. La investigación continúa abierta y no se descartan nuevas detenciones ni la vinculación del grupo con otros hechos delictivos.