Una granada de mano 'Otto', común en la Guerra Civil y II Guerra Mundial, y un proyectil de artillería han sido hallados, desactivados y retirados en Valladolid el mismo día. La labor ha sido realizada por los técnicos de desactivación de explosivos de la Policía Nacional, los Tedax.
Ha ocurrido durante la mañana de este jueves, según ha informado este viernes la Subdelegación del Gobierno en Valladolid. Un hombre alertó a la policía de que entre las pertenencias de su padre fallecido la familia había localizado lo que parecía ser una granada de mano.
Tras este aviso, los agentes se personaron en la calle Capuchinos de Valladolid, donde vivía el militar retirado ya fallecido y corroboraron lo contado por este vecino. Los Tedax han pedido a la mujer residente en la vivienda, viuda del fallecido, que abandonase la vivienda como medida de seguridad mientras los agentes llegaban a su casa.
Una vez allí, los técnicos de desactivación de explosivos certificaron que se trataba de una granada de mano, al parecer con la carga aún activa. Se han hecho cargo de ella, desactivándola y retirándola del lugar.
En estos casos en los que no se puede determinar si el artefacto mantiene la carga iniciadora, o la propia carga explosiva, “hay que extremar las medidas de precaución y tratar el artefacto como si estuviera armado, al objeto de evitar posibles accidentes”, han explicado los expertos.
Pero no ha sido el único artefacto explosivo localizado en Valladolid el mismo día. Y es que, con escasas dos horas de diferencia, un proyectil peligroso ha sido hallado también por el propietario de un local en la calle San Lázaro de la capital.
Mientras se encontraba realizando labores de limpieza en el mismo, el dueño encontró entre unas bolsas un proyectil de artillería. Llamó inmediatamente al 091, que ha actuado de la misma forma que en el caso de la granada: desalojar el local hasta la llegada de los Tedax. Los especialistas han retirado el proyectil con cautela para valorar si tiene carga explosiva e inutilizarlo con seguridad.
Según ha aclarado la Policía Nacional, es “relativamente habitual” recibir avisos de ciudadanos que ante el fallecimiento de familiares o conocidos encuentran entre sus pertenencias en ocasiones armas, municiones o incluso como en estos casos, explosivos, o bien al realizar obras en edificios que tienen una cierta antigüedad.
En estas circunstancias, indican que se debe llamar al 091 y poner en conocimiento de la Policía Nacional los hechos, para que se comisionen a unos agentes especializados al lugar y se hagan cargo de la situación.