Un hombre ha sido condenado a ocho años y nueve meses de cárcel por intentar prender fuego a la casa en la que vivía como okupa en Estepona (Málaga) después de protagonizar un fuerte encontronazo con sus vecinos en un bar. Así lo ha decidido la Audiencia Provincial de Málaga, que le ha condenado por un delito de incendio y otro de amenazas, informa el diario SUR.
Los hechos ocurrieron alrededor de las 21 horas del 21 de febrero de 2024, cuando el hombre incendió un sofá y otros objetos que había colocado en la entrada de la vivienda con intención de prender fuego al edificio. Las llamas, recoge la sentencia a la que ha tenido acceso el citado medio, provocaron “una situación de gravedad para quienes residían las viviendas colindantes”, ya que estaban comunicadas por el piso superior y compartían el mismo tejado.
Tribunales
En el juicio, el acusado se ha declarado inocente y ha dado a entender que habían sido los propios vecinos quienes habían provocado el fuego
Al ver las llamas, los vecinos salieron de sus casas e intentaron apagar el fuego con extintores. También trataron de apartar al acusado de la zona, quien, al ver que los demás intentaban sofocar las llamas, prendió fuego a varios trapos y trozos de cartón con la intención de extender el incendio. Tuvieron que intervenir Bomberos, personal sanitarios del 061, la Policía Local y de la Policía Nacional. Finalmente arrestaron al hombre.
Horas antes de los hechos, recoge la sentencia, el condenado había sido expulsado de un bar de la zona por estar molestando a los clientes. Fue entonces cuando empezaron las amenazas: dijo que mataría al camarero cuando saliese de trabajar y que prendería fuego al negocio. Se fue del bar, pero al cabo de un rato volvió con una cadena con una bola metálica y, más tarde, amenazó con dos pistolas al propietario y al encargado del bar.
En el juicio, el acusado se declaró inocente y dio a entender que habían sido los propios vecinos quienes habían provocado el fuego, informa el citado medio. Sin embargo, el tribunal ha considerado probada la culpabilidad del arrestado tanto por la versión de los testimonios de los afectados como de los distintos operarios que intervinieron, entre otras pruebas.
Finalmente, se le ha impuesto una pena de un año y tres meses por las amenazas y otra de siete años y seis meses por provocar el incendio. Además, se ha acordado la expulsión del territorio español y se ha prohibido su entrada al país durante diez años, en cuanto acceda al tercer grado o cuando se le conceda la libertad condicional.


