El epidemiólogo Fernando Simón se convirtió en el protagonista de Lo de Évole en la noche del domingo 16 de febrero. El rostro más popular de la crisis de la pandemia de la covid-19 se sentó para una de las entrevistas más complicadas de su carrera. Aunque ya con los peores momentos de la enfermedad como cosa del pasado -el virus dejó nada menos que 120.000 fallecidos en España- continúa acechando y cobrándose más víctimas.
Una entrevista que han querido comentar en Espejo Público, contando con Jordi Évole en primicia para poder saber más sobre cómo Fernando Simón vivió aquellos duros momentos sin querer lidiar con la fama que le fue impuesta.

Para Mariló Montero, Jordi Évole y su programa hicieron un “lavado de cara” al epidemiólogo Fernando Simón.
El programa fue un éxito de audiencia, pero Simón no terminó de convencer a algunos de los colaboradores presentes en plató, con Mariló Montero siendo la más crítica no solo con Simón, sino también con Évole, desvelando incluso que no se siente bien desde hace tiempo por un comentario que el presentador de LaSexta hizo sobre un escenario.
Mariló Montero comenzó cargando contra Simón, pero sobre todo ante la “línea del programa” de Évole, al que acusó de tener las “preguntas dictadas” por el gobierno para hacer un “lavado de imagen” al popular epidemiólogo tras su gestión de la crisis de la pandemia de la covid-19.
Jordi Évole a Mariló Montero: “Todas las opiniones están politizadas, la suya también”
Évole, irónico, contestaba: “Me gustaría aclarar una cosa que decía Mariló, eso de que esto podía formar parte de una operación de resarcimiento político. Le he reconocido que todas las preguntas me las pasó Pedro Sánchez. Se lo confirmo. Las fui haciendo una a una”, le lanzó, antes de afirmar, tajante: “Todas las opiniones en este país están politizadas, la suya también”.

Mariló Montero no pudo sino mantener una posición de lo más tensa.
Tras un tenso tira y daca, Susanna Griso despedía al presentador, que no se iba sin dar la puntilla: “Un saludo a Mariló”, terminaba Évole, antes de marcharse. “Todo queda entre compañeros”. Era entonces cuando la periodista saltaba, añadiendo: “Me voy a guardar la anécdota de los Ondas, Jordi. Yo también quiero saludarte con respeto y con afecto”.
Un comentario que dejaba perplejos a los presentes en el plató de Atresmedia, que observaban a Montero. “Yo creo que fue en los Premios de la Televisión de Vitoria”, aclaró Évole. “Será”, dijo Mariló, visiblemente molesta, que prosiguió. “Se me ha quedado clavado”. Susanna Griso, totalmente confundida y sin saber de qué hablaban, le preguntó a la periodista si iban a compartir de qué estaban hablando, pero Mariló Montero se negó, asegurando que “no es el momento”.
Mariló Montero admitía “tener clavada” una ofensa hecha por Évole hace años
“Yo no me acuerdo”, admitía Évole, encogiéndose de hombros, con media sonrisa. Mariló Montero, por su parte, no daba su brazo a torcer. “Lo dijiste desde el escenario, había muchos testigos”, apuntó la periodista, con una sonrisa forzada. “Son las cosas de las que no os dáis cuenta algunos”, se lamentó. “Pero con todo el respeto, es mi opinión”.
“No tengo ni idea de lo que estáis hablando”, admitía una vez más, algo exasperada, Susanna Griso. “Pero queda claro que hubo algo que a Mariló le molestó”. La periodista volvió a insistir que no era por eso que todas sus opiniones estaban en contra de las de Jordi Évole. “No tengo ningún inconveniente en saludarme con Jordi si me lo encuentro por los pasillos. Estas cosas hay que hablarlas en persona”.

Mariló Montero y Jordi Évole vivieron una situación que no han querido compartir.
Para Juan Soto Ivars, colaborador del programa, solo había una solución: “Esto solo puede terminar con Mariló en el programa”. Évole estuvo de acuerdo: “Lo valoraremos”. Eso sí, quiso disculparse: “De verdad, no me acuerdo de lo que dije sobre el escenario. Intentaría ser una gracia que no tuvo gracia. De verdad, si fui incorrecto, lo siento”.
La anécdota en cuestión solo puede referirse al discurso del presentador cuando recibió el Premio Joan Ramón Mainat en Vitoria, en 2015. Jordi Évole recibía el galardón por su programa Salvados, y dio un discurso sobre el escenario con el que habló entre otras cosas sobre la conveniencia de recibir un premio al formato.
“Me esperaba este premio porque el año pasado se lo dieron a Jorge Javier Vázquez y es la evolución lógica: de ‘Sálvame’ a ‘Salvados’”, ironizó, y prosiguió. El año pasado conocí a Jorge Javier y este, a Mariló”, dijo, haciendo referencia a Mariló Montero, antes de añadir: “Luego en la fiesta veremos qué pasa“.