Un ‘barman’ con un don especial
Todos solidarios
Marc Rueda forma parte de las 8.000 personas que han encontrado trabajo gracias a un programa de inclusión social
Marc Rueda hace dos años que trabaja en un restaurante del litoral de Barcelona
Marc Rueda monta mesas, sirve bebidas y prepara cócteles en el restaurante Gallito, en Barcelona. Para algunos puede parecer poca cosa “pero es muy importante”, reflexiona Marc Badia, Coordinador del Servei d'Inclusio Laboral de la Fundació Catalana Síndrome de Down. Porque su tocayo, el que se apellida Rueda, nació hace 26 años con una condición que lo hace, a su pesar, especial: tiene Síndrome de Down. Gracias al programa Incorpora de la Fundación La Caixa, hace dos años que trabaja en este local situado cerca de la playa. Y puede presumir de estar integrado en un grupo en el que es uno más. Ese es precisamente el éxito.
Diversidad
Un equipo laboral sin prejuicios ha sido clave
Este joven de Sant Boi de Llobregat (Barcelona), que tiene estudios de administrativo, llegó hace unos años a la fundación con la voluntad de que le ayudaran a buscar trabajo, explica Badia. Y tuvo la suerte de poder entrar en el programa Incorpora, que ha logrado que 8.000 personas con discapacidad además de mujeres víctimas de violencia de género o personas con adicciones, encuentren trabajo.
“Los clientes nos felicitan porque Marc esté con nosotros”,
Hace dos años que Marc trabaja en Gallito. Empezó montando mesas y haciendo tareas de auxiliar y ahora ya prepara y sirve cócteles. Una de sus especialidades, confiesa este joven, es el expreso martini (café, vodka y licor de café). “Lo han dejado ir creciendo y el éxito es que es uno más del equipo”, explican desde la fundación de síndrome de down. Porque los prejuicios son una de las barreras más complicadas de salvar en el mundo de la discapacidad. Y más cuando es una diferencia que no se puede esconder, cuentan. “Le gusta escuchar y aprender”, explica Willy Bella, el encargado del local y al que el joven ve como un padre y agradece la oportunidad que le ha brindado. Bella constató enseguida la rápida progresión y también las ganas de aprender de Marc. Aunque en Gallito todos aprenden de la experiencia, asegura el encargado.
Marc Rueda prepara cafés y cócteles de todo tipo
El caso de este joven es “excepcional”, reconocen en la fundación. Se han juntado diferentes variables que están asegurando la magnífica experiencia: un buen grupo empresarial, un equipo laboral sin prejuicios y también una buena base, gracias al trabajo de sus padres. Porque María del Mar y Joaquín han trabajado mucho para ayudar a su hijo. Y él hace lo mismo. Explica que le encanta cocinar, en parte, para ayudar a su madre.
“Los clientes nos felicitan porque Marc esté con nosotros”, cuenta Willy Bella. Elogian la importancia de dar una oportunidad a jóvenes como él.
Apasionado del fútbol
Un cóctel para Alexia Putellas y Messi
Marc cruza la ciudad solo en transporte público para desplazarse a local. Y aunque confiesa que al principio no era el trabajo que más le gustaba, pronto cambió de opinión. Y ahora explica que le gusta “todo” de su trabajo. Y le encanta preparar cócteles. Gran aficionado al fútbol y al Barça, tiene claro a quién le prepararía un buen cóctel: a Leo Messi, Cristiano Ronaldo y a Alexia Putellas.
Marc trabaja de lunes a viernes en horario de media jornada. Una reducción necesaria para personas como este joven, explican desde la fundación. La adaptación horaria que le permite “dar el máximo de sí”, aunque si hay trabajo no tiene inconvenientes en alargar. Desde la Fundación se congratulan de que cada vez más empresas se animen a contratar a personas con discapacidad, no como una operación de marketing, sino porque deben ser “un reflejo de la sociedad”. También a Marc le gustaría ver a más como él detrás de la barra y en otros puestos de trabajo. Porque tener una plantilla diversa mejora el clima laboral y logra un mejor entorno, defienden desde la fundación. Algo que han constatado con Marc.