Una mujer de 38 años ha sido asesinada este martes por su pareja en Aldeanueva del Camino, un municipio de 700 habitantes del norte de la provincia de Cáceres, poco después de que el hijo de ambos, de 14 años, saliera de la casa para acudir al instituto.
El cadáver, que presentaba heridas por arma blanca, ha sido hallado debajo del balcón de la casa en la que residía junto a su hijo y su pareja, que ya ha sido detenido.
En este mismo lugar, la zona exterior de la vivienda, situada en el entorno de la antigua travesía de la N-630 a su paso por el municipio, ha sido localizado el presunto agresor, que también presenta heridas por arma blanca, cuyo origen aún no se ha esclarecido, y ha sido trasladado al Hospital de Plasencia (Cáceres).
En el Juzgado de Violencia contra la mujer
Una llamada al Centro de Emergencias 112 de Extremadura alertando de algún hecho delictivo movilizó a la Guardia Civil hasta la vivienda, cuyos efectivos han abierto una investigación para tratar de esclarecer este crimen machista.
Las investigaciones tratan de esclarecer si el varón, de 39 años, agredió a su pareja, para empujarla posteriormente desde el balcón de la casa y luego lanzarse él, o ella quiso huir de la agresión precipitándose desde la terraza exterior.
Hasta el lugar del crimen se ha desplazado el titular del Juzgado de Instrucción 5 de Plasencia para la diligencia del levantamiento del cadáver, aunque la causa recaerá en el Juzgado número 5, a tenor del turno de guardia, el cual se inhibirá en favor del Juzgado Provincial de Violencia contra la Mujer de Cáceres, han informado a EFE fuentes judiciales.
Sin antecedentes
En el seno de la pareja no figuraban antecedentes por violencia machista en el Sistema de Seguimiento Integral en los casos de Violencia de Género (VioGén), según ha afirmado el delegado del Gobierno en Extremadura, José Luis Quintana, quien se ha desplazado a Aldeanueva del Camino.
La localidad está “desolada” y “consternada”, como ha apuntado su alcalde, Ricardo García, poco después del minuto de silencio que se ha guardado frente al edificio consistorial, cuyas banderas ondean a media asta y cuyo Gobierno local ha decretado tres días de luto.