En España, el gasto público en salud representa tres cuartas parte del total, pero el privado ha escalado de forma más constante en las últimas dos décadas y actualmente supone en 25,9% del gasto sanitario total. Los hogares españoles dedicaron en el 2023 un promedio de 631 euros por cada uno de sus miembros al cuidado de la salud.
Un informe de la Fundación BBVA sobre el gasto en salud de los hogares españoles destaca que el desembolso privado aumentó un 50% entre el 2003 y el 2022, hasta situarse en 33.606 millones de euros. Ha experimentado un crecimiento lineal, mientras el gasto público se disparó entre el 2003 y la recesión para experimentar una fuerte caída del 2009 al 2013 y una recuperación a partir del 2014, alcanzando en el 2019 los niveles previos a la recesión. “Desde entonces mantiene la tendencia expansiva”, señala el documento.
¿A que destinan los hogares los gastos en salud? Según la Encuesta de Presupuestos Familiares del INE, en el 2023 la mitad del presupuesto (631 euros por persona) se destinó a la compra de aparatos y equipos terapéuticos como gafas graduadas, lentillas o audífonos (182 euros) y al pago de seguros privados de salud (131 euros).
De entre tres niveles, los hogares con más ingresos gastan cuatro veces más en salud que las de menor renta
La otra mitad se destinó principalmente a la compra de productos farmacéuticos y otros productos médicos (116 euros), servicios dentales (88), servicios médicos y hospitalarios (68) y servicios auxiliares como pruebas diagnósticas, rehabilitación, psicología o fisioterapia (46 euros).
El gasto de las familias en salud representa “un porcentaje reducido de la cesta de la compra de los hogares como consecuencia del carácter universal y público del sistema sanitario español”, indica el informe de la Fundación BBVA. Sin embargo, ha crecido en las últimas décadas (del 3,4% en el 2006 hasta el 4,8% en el 2023) y marca “un cambio en el patrón privado de consumo de salud”.
En el porcentaje de gasto han perdido importancia relativa en los últimos años la compra de gafas o audífonos, así como los servicios dentales. En cambio, ganan peso los seguros privados de salud, que representan el 20,7% del gasto sanitario de las familias, casi 5 puntos porcentuales más que en el 2010.
El informe, que forma parte del programa de investigación en socioeconomía de la Fundación BBVA y el Ivie, recalca que la evolución del gasto sanitario, tanto público como privado, viene marcado por diversos procesos relevantes, como el traspaso de las competencias a las comunidades autónomas culminado en el 2002, el envejecimiento de la población, la crisis financiera, “que supuso fuertes ajustes en los recursos de la sanidad pública”, y la emergencia sanitaria de la Covid-19.
Pero no todas las familias gastan lo mismo en salud y existen sustanciales desigualdades en función de los niveles de renta. Los hogares con mayores ingresos gastaron en el 2023 938 euros de promedio por persona, casi cuatro veces más que los que pertenecen al primer tercil de ingresos (los más bajos), que destinaron 265 euros.
“Las diferencias de gasto sanitario en función de los niveles de renta se acentúan en el uso de servicios cuyo acceso depende, sustancial o únicamente, de la financiación privada”, precisa el estudio, en referencia a las prestaciones en salud bucodental, rehabilitación y fisioterapia u optometría. “Cuando los servicios de salud son costeados directamente por las familias la igualdad de oportunidades en el acceso a la salud de las personas con menos recursos se ve afectada”.
Los expertos proponen incorporar a la cartera de servicios del SNS coberturas básicas que hoy están excluidas
En este sentido, los expertos de la Fundación BBVA proponen “incorporar a la cartera se servicios del SNS coberturas básicas de servicios hoy excluidos, facilitando el acceso a las familias que tienen dificultades para obtenerlos por su propios medios”. Según el informe, este acceso podría facilitarse mediante bonos para la financiación de los servicios en centros privados, mediante la prestación gratuita en los centros público o a través de una combinación de ambas fórmulas.
En esta línea, el Gobierno ha anunciado esta semana una ayuda de 100 euros para la adquisición de gafas y lentillas el próximo curso escolar. Esta ayuda será universal, para todos los niños menores de 16 años, independientemente de la situación económica de la familia.


