‘La Vanguardia’ apuesta por Europa y sus valores, hoy más que nunca
Premios Vanguardia
Los diez premiados encarnan unos valores europeos que demuestran andando
Un millar de representantes de la sociedad civil asiste a la gala
Un grupo humano prestigioso: los galardonados en los Premios Vanguardia 2025
La gala de los Premios Vanguardia que se ha celebrado este lunes en el Palau de Congressos de Catalunya
“La Unión Europea y sus valores son más necesarios que nunca”, señaló Manel del Castillo, director del hospital Sant Joan de Déu, premio Innovación y Ciencia, que agradeció los reconocimientos en nombre de los diez galardonados en la 3.ª edición de los Premios Vanguardia, desarrollada anoche en el Palau de Congressos de Catalunya.
La gala respiró una idea de Europa alejada de sus laberintos funcionariales y enfocada en unos valores tangibles: las personas que con su trabajo, ejemplo y forma de pensar confirman que el movimiento europeo se demuestra andando.
Desde la lucha contra el silencio de las mujeres violadas –Caroline Darian, hija de Gisèle Pelicot, premio Internacional– hasta el exitoso consorcio Airbus, del altruismo sin alharacas de Elena Barraquer o 30.000 cirugías gratuitas en países subdesarrollados a la proyección presente y futura de la cantante Aitana. De la cabeza oxfordiana del ensayista Timothy Garton Ash al empuje empresarial de Demetrio Carceller, cuya Damm querida cumplirá 150 años en meses, hija de un expatriado cervecero alsaciano que huía de la guerra franco-prusiana.
Los galardonados en los premios Vanguardia 2025 junto a Felipe VI, Pedro Sánchez, Salvador Illa, Jaume Collboni, Javier y Carlos Godó y Jordi Juan
Europa no sería Europa sin sus cafés y sus catedrales, de ahí el premio Impulso a las Ciudades al arzobispo Omella por la cercana conclusión de la Sagrada Família, en cuyos confesionarios deberían imponer penitencia a los que siempre dijeron que no estará acabada nunca. Para combatir la desmemoria, premio In Memorian al arquitecto Ricardo Bofill, que superó las capillas locales a base de proyectos en Europa y medio mundo.
Finalmente, mientras el cielo de la Comunidad Valenciana rememoraba la tragedia, el premio Solidaridad distinguió a dos entidades no gubernamentales que, sobre el terreno, paliaron los efectos de la dana –Cruz Roja y Cáritas– y a las agrupaciones de afectados Asociación de Damnificados por la Dana Horta Sud-Valencia, Víctimas Mortales de la Dana y Víctimas de la Dana 29 de Octubre.
La gala fue presidida por Felipe VI, los presidentes Pedro Sánchez y Salvador Illa, Yolanda Díaz, el alcalde Collboni y el presidente del Parlament
Modestia aparte, pocas instituciones, entidades o empresas de Catalunya tienen el poder de atracción que muestra La Vanguardia para reunir en Barcelona en torno a unos galardones al Rey Felipe VI, el presidente de Gobierno Pedro Sánchez, la vicepresidenta Yolanda Díaz, el alcalde Jaume Collboni, el presidente del Parlament Josep Rull... y eso tan valioso que se llama sociedad civil, ampliamente representada y que dedicó una ovación prolongada a las autoridades.
La gala resaltó la fidelidad de La Vanguardia a la Unión Europea, más necesitada que nunca de apoyo y cariño, con la excusa de los 40 años de la firma del tratado de adhesión de España. Conviene recordar a los clásicos. Así, el editor Javier Godó resaltó que: “Necesitamos más Europa, Europa es nuestro futuro y nuestro destino, como decía el canciller Kohl”.
La credibilidad es un valor inherente al periodismo y el europeísmo de La Vanguardia no sólo resiste la prueba de la hemeroteca sino que se sustenta en ella. Todo menos coyuntural. La elección de los premiados y el espíritu de la ceremonia fue una prolongación de más de 70 años de línea editorial favorable a la construcción de Europa, defendida a ultranza por la propiedad, la familia Godó, de la que Carlos Godó encarna la quinta generación, como así lo recordó el editor, y una larga lista de directores, periodistas y colaboradores ilustres.
“Mercaderes de la mentira y traficantes de odio compiten con el periodismo honesto en el mercado de la atención”, afirmó Pedro Sánchez
Los diez premios y la atmósfera del Palau de Congressos de Catalunya sintonizaban con el espíritu que alumbró la UE, cuyos valores aportan luz aunque haya conocido tiempos más espléndidos y menos hostiles. “Europa no se hará de una vez ni en una obra de conjunto: se hará gracias a realizaciones concretas, que creen en primer lugar una solidaridad de hecho”, afirmó el canciller francés Robert Schuman en su célebre declaración de mayo de 1950. No es momento de arrojar la toalla, se diría tras escuchar las intervenciones de la gala.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, cerró el acto –a falta de discurso de Felipe VI– con un elogio apasionado a la grandeza del buen periodismo. “Hoy, el periodismo de calidad libra una desigual batalla en el universo digital. Mercaderes de la mentira y traficantes de odio compiten con el periodismo honesto en el mercado de la atención. Sus bazas son el ruido y la furia frente al análisis riguroso que medios como La Vanguardia ejercen desde hace décadas”. Para el president Salvador Illa, europeísta convencido, los premios son un ejemplo de lo imperioso que resulta de que todos “creamos en la democracia , en el diálogo y la cooperación internacional , en la política nobel, en Europa, en la cultura y la ciencia y que demostremos que somos mayoría. Estoy convencido de que la somos”.
Un vídeo recordó Gaza, el mayor cementerio de periodistas de la historia, para pedir el fin de la guerra y la liberación de los secuestrados
La ceremonia incluyó un vídeo de varios minutos dedicado a la guerra de Gaza, el mayor cementerio de periodistas de la historia. El editor Javier Godó recordó esos 250 informadores muertos en la franja antes de la proyección, en la que se pedía el final de la guerra y la liberación de todos los rehenes. El alcalde de Barcelona fue más allá, afianzado una idea que mencionó hasta en cinco ocasiones: “Cuando Barcelona habla, el mundo escucha”. Y además de hablar respecto a la guerra en Gaza, “Barcelona reacciona y pone en marcha una iniciativa como fue Districte 11 Sarajevo en favor de la reconstrucción de las ciudades palestinas”.
Tras la ceremonia, tanto el rey Felipe VI como el presidente Sánchez departieron casi una hora con los asistentes en el cóctel servido en el mismo Palau de Congressos. Lejos de Madrid, hay menos ruido y pasan estas cosas y se dan estos premios sin ánimo de ser lanzados a la cabeza de nadie. La periodista Helena García Melero presentó la ceremonia, en la que también actuó el grupo Cuatr8chos, cuya coreografía representó esas salas de espera de aeropuertos, otra estampa de la Europa de la movilidad. Todo se desarrolló sin contratiempos, con un Pere Guardiola, director comercial del Grupo Godó, al quite como el director del diario, Jordi Juan y media redacción, colectivo que siempre ha sintonizado con el europeísmo del diario.