Con una tasa del 29% en adultos en Inglaterra según datos de 2022, la obesidad es uno de los problemas de salud más corrientes en Reino Unido. Por ese motivo, en el Congreso Anual del laborismo que se está celebrando en Liverpool, el ministro de Sanidad Wes Streeting ha asegurado que se tratará a “millones” de británicos para poner fin “al problema de la obesidad” ¿Cómo? Incluyendo los tratamientos adelgazantes inyectables —Ozempic y similares— en el NHS, la sanidad pública británica.
La medida beneficiará sobre todo a británicos de entre 55 y 64 años: tres de cada cuatrp padecen sobre peso u obesidad, que afecta a uno de cada tres. “Los ricos hablan de cómo han transformado su salud, su confianza, su calidad de vida”, aseguró Streeting, en clave política. “Pero, ¿qué pasa con los millones que no pueden permitírselo? Eso es volver a los tiempos en los que la salud estaba determinada por la riqueza”.
Las normas actuales del NHS restringen las inyecciones para perder peso a cientos de miles de pacientes en lugar de a los millones que podrían beneficiarse, y Streeting afirmó que es “nuestro deber histórico” garantizar que los medicamentos modernos “estén disponibles no solo para algunos, sino para todos”.
Queda por determinar la amplitud de ese todos, dado que según el National Child Measurement Programme (NCMP), el 22% de los menores que tenían entre 10 y 11 años en 2024 padecían obesidad. Sin embargo, la mayoría de adelgazantes inyectables no son adecuados para menores, excepto en casos de diabetes tipo 2.


