Personas a las que las emociones negativas afectan especialmente, así son aquellos que presentan de forma acusada el rasgo de la personalidad del neuroticismo. El psicólogo estadounidense Lewis Goldberg, en su estudio publicado en Journal of Personality and Social Psychology en 1990, presentó un modelo basado en cinco rasgos de la personalidad y cómo estos podían moldear el carácter. Estos fueron la apertura a la experiencia, la conciencia, la extroversión, la amabilidad y el neuroticismo, que definen a los individuos según sus niveles sean más altos o bajos. En el caso del neuroticismo, este se relaciona con la capacidad o vulnerabilidad de una persona para lidiar con las emociones y experiencias negativas. De esta manera se diferencia entre personas emocionalmente estables o inestables.
Los cambios bruscos de humor, las reacciones desproporcionadamente intensas o la fragilidad ante el estrés representan características propias de la inestabilidad emocional, según la psicóloga Raquel Ruiz. Y esto implica toda una serie de consecuencias en el día a día, en especial en lo referente a las relaciones e interacciones sociales. Por tanto, si a esta inestabilidad emocional se le suma la alta reactividad propia del neuroticismo, el resultado será la aparición de problemas en la vida social de quien presente un alto nivel de este rasgo. De hecho, el psicólogo Mark Travers advierte de que se trata del rasgo de la personalidad que más rupturas y divorcios provoca.
¿Por qué el neuroticismo puede acabar con un matrimonio?
80.065 personas se separaron o divorciaron durante el pasado 2023, según los datos más recientes del Instituto Nacional de Estadística (INE), mientras que se produjo algo más del doble de enlaces (172.430). Existen diversos motivos que llevan a las parejas a ponerle punto y final a su compromiso, entre ellos, el debilitamiento del vínculo a causa de los conflictos y problemas del día a día. En este sentido, según adelantaba el psicólogo Mark Travers, aquellas relaciones en las que al menos uno de los integrantes cuente con una personalidad de un marcado neuroticismo tendrá más posibilidades de fracasar.
Esto se debe a dos razones principales a las que apunta el especialista. La primera de ellas tiene que ver con el fuerte sesgo negativo que implica el neuroticismo. “Los individuos neuróticos a menudo interpretan eventos ambiguos o neutrales a través de una lente pesimista”, explica. Esto ocasiona un mayor número de conflictos, ya que simples hechos o situaciones sin importancia pasarán a adquirir una connotación más grave. Incluso es posible que se malinterpreten comentarios neutrales o incluso “benignos” de la pareja como todo lo contrario, añade el psicólogo.
El segundo factor es la reactividad emocional, o lo que es lo mismo, la desastrosa combinación de una mayor sensibilidad y la dificultad de gestionar sus propias emociones unidas a reacciones descontroladas. Esto acaba produciendo un fuerte desgaste del vínculo de la pareja.


