La carne es uno de los pilares de la alimentación. Ternera, cerdo, pollo…estos son solo algunos ejemplos de productos que se consumen y que aportan infinidad de beneficios nutricionales. Un alimento tan demandado, sin embargo, entraña varios inconvenientes, el primero de ellos el precio que pueden llegar a alcanzar.
Las cifras se disparan especialmente cuando el producto es de mucha calidad, y las carnicerías son testigos de ello. Precisamente por eso, el carnicero Mariano Sánchez Díaz (@el_as_carnicero) ha revelado la solución para ahorrar en uno de estos productos sin restarle sabor e incluyendo otros beneficios añadidos.
Lo ha explicado en un vídeo de Instagram, donde el experto ha incidido en el precio de la cinta de lomo fresca y el truco perfecto para evitar gastarnos mucho dinero en este producto tan consumido. Y es que, a su parecer, pedir en la carnicería este producto solo es un “error”, que además supone un gasto añadido en la economía doméstica.
¿Cómo ahorrar dinero en la cinta de lomo fresca?
La gran mayoría de personas piden en los establecimientos locales la carne que se van a comer en los próximos días, para así evitar congelar demasiado. Esta técnica, sin embargo, supone un gasto de dinero innecesario que se podría solventar de una forma muy sencilla. “Ahorrad dinero, que para eso estamos”, ha sentenciado.
Para el experto, la clave reside en pedir en la carnicería otra pieza distinta. “Si tenéis pensado comprar cinta de lomo fresca, os recomiendo siempre que compréis un trozo de chuletero, de chuleta”, ha apostillado el experto, quien ha incidido en que se preste atención a la proporción que se necesite.
“De aquí, el carnicero, como es súper profesional y súper simpático os va a sacar, por un lado, la cinta de lomo fresca y por otro lado os va a dejar un poquito de carne en las costillas”, ha señalado Sánchez Díaz. Por supuesto, esta no ha sido la única recomendación que ha explicado en el metraje, de algo menos de un minuto y medio de duración.
Beneficios añadidos del truco
“Siempre tenéis que comprar la parte de la costilla”, ha asegurado el carnicero. Mientras, la otra pieza se prepara para cortarla al gusto del consumidor, ya sea en filete, o en libros. Esta técnica permitirá al cliente un ahorro de más de dos euros el kilo, lo que se nota mucho en la economía doméstica, al ser un producto tan consumido.
Pero, no solo eso. El carnicero ha incidido en otro beneficio añadido que se desprende del truco. En concreto, al pedir este chuletero también estaremos comprando para más días y hasta para una segunda comida diferente: las costillas. “Es un ahorro para vuestro bolsillo y tenéis aquí un par de comidas, en vez de llevaros la cinta de lomo solo, que os va a salir más cara”, ha concluido.