La pizza más cara del mundo cuesta 2.000 euros, y el streamer Ibai Llanos no ha dudado en probarla para comprobar si realmente merece cada euro que se paga por ella. Para ello, ha viajado hasta Nueva York (Estados Unidos), donde se encuentra el restaurante con el récord Guiness por vender la pizza más cara del mundo.
“Esta pizza me ha costado 2.000 euros. Es la pizza más cara del mundo. ¿Merecerá la pena? Seguro que no”, empieza Llanos en el vídeo que ha dado la vuelta a internet.
Mientras enseña este costoso plato ante la cámara -una pizza de tamaño normal con los bordes negros- el streamer explica el motivo por el que es tan cara. “Tiene 24 quilates de oro, foie gras, caviar, trufas y una masa de tinta de calamar negro”, explica.
“Tiene unas florecitas para decorarlo. ¿Tiene buena pinta? La verdad es que en absoluto”, reconoce Ibai Llanos, que ya muestra arrepentimiento por haberse gastado este dineral por la pizza que tiene delante.
Sin embargo, ya ha decidido pedirla, así que procede a probarla, no sin antes apuntar que cada trozo que se está comiendo cuesta 300 euros. Y llega el momento del veredicto: “Sorprendentemente, está buena para la pinta que tiene”, apunta Llanos.
Reacciones en redes
“No sé cómo sabe, pero la verdad es que tiene una pinta horrible”
El streamer apunta que sabe especialmente a foie gras y a caviar y, con contundencia, dice: “¿Repetiría? No. Me han timado”. Como era de esperar, el vídeo se ha hecho viral en redes. Y es que escuchar que una pizza cuesta 2.000 euros no es algo que ocurra todos los días. Sin embargo, muchas personas han comentado que ya era de esperar que fuera “un timo”.

