Si Maria Nicolau se ha convertido en una de las cocineras más mediáticas del país es porque no se muerde la lengua. Tiene unas convicciones gastronómicas muy firmes y una forma de expresarlas directa y llana. El último ejemplo es la reflexión que ha compartido en las redes sociales contra la tendencia a eliminar los carbohidratos de muchos platos de restaurante.
“Me está desterrando los hidratos de carbono de las cartas y nos está quedando una restauración gastro en Barcelona con raciones de modelo a precios de tinta de impresora”, critica la cocinera. Y añade, con sarcasmo: “Suerte tenemos que poder comprar, saliendo, en cualquier esquina, un buen kebab de postre ”.
Me está desterrando los hidratos de carbono de las cartas y nos está quedando una restauración gastro en Barcelona con raciones de modelo a precios de tinta de impresora”
En una publicación en la plataforma X, Maria Nicolau ha puesto como ejemplo el arroz y los fideos, dos ingredientes emblemáticos de la gastronomía tradicional catalana. Este tipo de alimentos saciantes y económicos, argumenta, son cruciales para evitar que los clientes se marchen con hambre, y permiten a los restaurantes obtener más margen de beneficio de cada plato.
” No entienden que el arroz en la cazuela se inventó para poder vender cuatro gambas con margen, o que los fideos son el negocio en un plato de galeras”, expone la cocinera.
Hacen cocina de producto, te dan tres guisantes lágrima y un corte de sardina ahumada a 23 euros y tú sales con hambre”
Y concluye con una sentencia contundente, como no podía ser de otra forma: “Hacen cocina de producto, te dan tres guisantes lágrima y un corte de sardina ahumada a 23 euros y tú sales con hambre.”
Y para hacerse una idea del tipo de platos a los que se refiere, ha recomendado echar un vistazo a las últimas publicaciones compartidas por la cuenta @socdevida, un perfil anónimo que a menudo cuelga fotografías de varios restaurantes gastronómicos con ejemplos como los que critica Maria Nicolau.
Este artículo fue publicado originalmente en RAC1.