Pone una reseña criticando varios puntos de un restaurante y este le responde justificándose: “Comida y espectáculo por cinco euros”

Cuando uno acude a un restaurante o a un bar es para pasar una velada agradable. Puede ser acompañado de la familia, los amigos, la pareja, o incluso solo. Lo que no quiere es tener que estar escuchando gritos de manera constante.

Muchas personas no tienen eso en consideración, ya sea porque quieren hacerlo a propósito o simplemente tienen un tono de voz elevado. El problema llega cuando las voces proceden de los propios trabajadores del local.

Algo así es lo que le ha sucedido a un cliente tras acudir a un restaurante, además de otros puntos negativos que ha dejado escritos en una reseña. La cuenta de Twitter de @soycamarero ha compartido el texto.

La opinión enumera varios puntos malos: le sirvieron una Coca-Cola de lata, le miraron mal cuando pidió hielo, la tortilla no fue de su gusto y, para rematar, el encargado se ponía a gritar a su madre allí presente y a los empleados.

Sin embargo, este último punto es el que ha querido explicar el propio local. En la contestación ha pedido que el cliente vuelva para que cambie de opinión. En cuanto a los gritos, se ha justificado alegando que la señora “es sorda y no oye nada”.