El neuropsicólogo Álvaro Bilbao, autor de varios libros de referencia sobre educación y desarrollo cerebral en la infancia, ha compartido en un vídeo de TikTok una advertencia clave para padres y madres con hijos pequeños. Según explica, hay tres cosas que nunca haría con un niño de 2 años porque pueden marcar de forma negativa su desarrollo a nivel cognitivo y emocional.
“Sé que está muy de moda la educación sin normas, pero si no pones límites a los niños de 2 años los daños pueden ser muy difíciles de reparar”, asegura Bilbao, especialista en plasticidad cerebral.
La interacción de padres e hijos en la primera infancia tiene un impacto duradero en el aprendizaje de los niños
1. No poner límites
El primer error que menciona es criar sin normas ni límites claros. A esta edad comienza a desarrollarse la corteza cingulada, la región encargada de gestionar la frustración y el autocontrol. Si no se establecen reglas desde temprano, advierte el neuropsicólogo, los niños crecerán con más dificultades para autorregularse.
Captura de vídeo
2. Razonar hasta la saciedad
El segundo error es tratar de razonar en exceso con un niño de dos años. Bilbao explica que, aunque muchos padres lo intentan, el razonamiento lógico todavía no se ha desarrollado en esa etapa. “Explícale las cosas una vez, pero no entres en debates. Solo le van a dar la falsa impresión de que puede controlar la situación”, indica.
Padre corrigiendo la conducta de su hijo
3. Ser duros o poco afectivos
El tercer aspecto que desaconseja es ser demasiado estrictos o duros. Según Bilbao, a los 2 años los niños necesitan sobre todo afecto y seguridad emocional. Como en este momento están aprendiendo a gestionar sus emociones, reaccionar con dureza solo les enseñará a perder el control cuando se frustren.
Educar desde el equilibrio. La propuesta de Bilbao pasa por un equilibrio entre firmeza y cariño: establecer normas claras y consistentes, pero siempre desde el acompañamiento afectivo. De esta forma, se favorece que los niños desarrollen autocontrol, capacidad de gestionar la frustración y seguridad emocional.
