El éxito de Maluma no se limita a cifras de ventas, giras internacionales o colaboraciones con los grandes nombres de la música global. Su trayectoria revela un camino de constante evolución personal, donde la fama y el reconocimiento se entrelazan con la necesidad de madurar y mantenerse auténtico.
En el episodio titulado “Una charla con Juan Luis, Maluma” del podcast 'NUDE Project', el cantante colombiano ha reflexionado sobre su evolución personal y profesional, compartiendo cómo ha logrado mantener su autenticidad en medio de las presiones del éxito.
Maluma en una de sus actuaciones
“Quiero hablar de la vida y quiero hablar a la gente de cómo he podido superar la ansiedad”
Tono íntimo. En lugar de centrarse en su discografía o logros, la charla profundiza en la persona detrás del personaje público, explorando sus inseguridades, aprendizajes y la importancia de la salud mental en la industria del entretenimiento.
El cierre de una etapa. El cantante afirma que no tuvo que destruir al personaje que había creado, pero aprendió que no era el momento de cerrar ese primer capítulo de su carrera: “No me arrepiento de absolutamente nada y amo todo lo que me pasó. Amo a ese personaje”, añadió.
El cantante colombiano Maluma canta durante su presentación como parte de su gira mundial ”+Pretty +Dirty”
Salud mental. Maluma explica que sentía que había cumplido todos sus objetivos en la vida pero que sentía un dolor en su interior. Afortunadamente logró salir hacia adelante y su deseo, ahora, es inspirar al mayor número de personas: “Quiero hablar de la vida y quiero hablar a la gente de cómo he podido superar la ansiedad”, comentó.
Excesos. En su etapa más desenfrenada, Maluma cuenta que deseaba estar cada día con una mujer distinta y que sentía que si un día se emborrachaba, pero después iba al gimnasio, estaba haciendo lo correcto: “Lo que estaba haciendo era una bomba de relojería. La vida me obligó a parar. Me dio una crisis tan fuerte que pensaba que me iba a morir”, confesó.
Reflexión. El cantante es consciente de los privilegios que conlleva su fama, pero también defiende su derecho como ser humano a pasar malos momentos y a aprender de ellos: “Tenemos un trabajo maravilloso, vivimos de lo que amamos y cambiamos vidas a través de nuestro arte. Pero también tenemos el derecho a sentirnos mal. En la vida se sufre, pero se deja de sufrir cuando uno acepta que el sufrimiento forma parte de la vida”, termina diciendo.

