Joan Manuel Serrat ha recibido este martes el premio KM 13.774 de la Fundació Casa Amèrica Catalunya, un galardón que reconoce a quienes han contribuido de forma decisiva a estrechar los lazos culturales entre Catalunya y América Latina. La ceremonia, celebrada en el auditorio del Conservatori del Liceu de Barcelona, se ha convertido en una conversación entre amigos y en el testimonio de la huella profunda que Serrat ha dejado a ambos lados del Atlántico.
El nombre del premio no es casual. Son los kilómetros que separan Port Lligat, en la Costa Brava, de Hanga Roa, en la Isla de Pascua (Chile). Una distancia que resume la vocación de puente cultural del galardonado. El reconocimiento, una pieza del mural del auditorio de Casa Amèrica Catalunya, le ha sido entregado por Maria Eugènia Gay, presidenta de la Fundació Casa Amèrica de Catalunya, y por su directora, Marta Nin.
Es un premio que siento muy cercano, porque habla de un oficio que me ha hecho conocer el mundo
“Es un premio que siento muy cercano, porque habla de un oficio que me ha hecho conocer el mundo”, dijo Serrat, que, a sus 81 años, ha subido al escenario con la naturalidad y el humor de quien se encuentra en territorio familiar. En el coloquio, ha repasado anécdotas, ha evocado su primer viaje a América Latina en 1969 y ha compartido cómo aquel periplo cambió su vida para siempre.
“Yo no sabía la difusión que tenían mis canciones allí. El disco de Machado coincidió con ese primer viaje a Argentina. Fui con la ilusión de unas vacaciones, saliendo de una España aún muy turbia y opresiva… y me encontré con un mundo muy goloso, muy libre”, ha recordado. Aquella gira, que iba a durar tres meses, se alargó a medio año y fue el inicio de una relación profunda con el continente: “Me encontré con músicos extraordinarios, muy diversos. Fue una época feliz, de una libertad inusitada”.
El acto, moderado por la periodista cultural Pepa Fernández, ha reunido a varias figuras del ámbito iberoamericano y amigos del cantante, como el escritor mexicano Jordi Soler, el periodista colombiano Daniel Samper y el crítico argentino Alejandro Lingenti.
La velada se ha completado con interpretaciones musicales. El cuatrista venezolano Leo Rondón ha ofrecido una versión instrumental de Mediterráneo y la cantante catalana Sara Pi ha interpretado una versión bilingüe (catalán y portugués) de Paraules d’amor.
Serrat ha sido definido por la fundación como “un creador de vínculos gigantes, sostenidos en el tiempo y llenos de afectos”. Con este reconocimiento, el cantautor barcelonés se suma a una lista de premiados que incluye nombres como Ida Vitale, Cristina Peri Rossi, Martín Caparrós o Pere Camps.