En las discotecas españolas, a principios de 1975, la canción Rock The Boat continuaba sonando en las pistas de baile como anuncio de la era de la música disco. Fuera de la pista, la llamada música progresiva española se hace un pequeño hueco en el mercado musical. La barcelonesa sala Zeleste sirve de encrucijada musical para la confluencia de estilos, jazz, salsa, flamenco, pop, rock, folk, se funden y agitan. Buena parte de la escudería Zeleste, junto con otras voces como los andaluces Lole y Manuel o el guitarrista sevillano Gualberto, formarán el cartel del primer Canet Rock, el festival que se celebra en ese mismo año echándole un pulso a la censura y las trabas gubernativas del franquismo.
Otro punto cardinal del tablero musical es la canción de autor y antifranquista. A los clásicos, Raimon, Paco Ibáñez, Pi de la Serra, Lluís Llach, Víctor Manuel, se suman nuevas voces líricas, Joan Isaac, Ramon Muntaner, grupos folk como los vascos Oskorri, los ibicencos UC o los valencianos Al Tall, el aragonés José Antonio Labordeta, el extremeño Pablo Guerrero o, desde el sur, el granadino Carlos Cano. La grabación de un disco en directo desde el Olympia de París añade pedigrí. Un caso aparte es el del cantautor Joan Baptista Humet, que siguiendo el modelo Serrat graba en castellano saltando a las listas de éxito.
⁄ Los melódicos siguen en las listas de éxitos y aparecen nuevas generaciones del flamenco y el rock urbano
Los primeros tiempos de la Transición suponen para el género crítico un periodo de efervescencia, sirviendo de altavoz desde palacios de deportes y plazas de toros para la debutante clase política. Desde el ángulo femenino, la figura de Maria del Mar Bonet sigue profundizando en la música de raíz popular mientras desde el centro voces como Ana Belén, Rosa León o Elisa Serna ejemplifican el modelo de canción de autor en femenino, junto con cantantes como Cecilia, Maria Ostiz o Mari Trini. O la ex Setze Jutges Guillermina Motta aún bajo la sombra del Remena nena.
Desaparecidos o pasados a segunda fila los grupos musicales que encabezaron la revolución musical de los sesenta en España, un músico como Fernando Arbex produce con éxito internacional una formación como Barrabás mientras Miguel Ríos inicia una nueva travesía del desierto a la espera de su renacimiento a finales de los setenta. El rock con acento y fusión desembarca desde Andalucía con una nueva generación de voces flamencas. Y el llamado rock urbano madrileño se presenta con el grupo Burning.
Por su parte, el imperio de la canción melódica continúa en las listas de éxitos y en los gustos particulares, de Julio Iglesias a Camilo Sesto, de Danny Daniel al brasileño Roberto Carlos. La búsqueda de un sucesor al desaparecido Nino Bravo anima a las editoras a encontrar nuevos herederos, como Juan Camacho, que triunfa con la canción A ti mujer en un Festival de Benidorm que da sus últimos coletazos. Mientras, Georgie Dann nos seguía animando a bailar El Bimbó .
1975 en 20 canciones:

Desmadre 75
Desnadre 75
Saca el güisky cheli
La canción descerebrada cuenta con una larga tradición en la música española. La banda sonora del verano de 1975, en medio del runrún político, acoge con descaro esta canción lo suficientemente pogre-gamberra para ser degustada por públicos bien diversos.

Raimon
Raimon
Jo vinc d'un silenci
La noche histórica del 30 de octubre de 1975 el Palau d’Esports de Barcelona servía de puesta de largo para la canción en la que Raimon condensaba sus principios y convicciones. Cincuenta años después continúa impecable y sin apenas ninguna arruga.

Camilo Sesto
Camilo Sesto
Getsemaní
Con Franco a punto de morir, Camilo Sesto asciende al paraíso melódico como intérprete escénico y estrella musical. El tema de la ópera-rock Jesucristo Superstar será para el cantante su canción talismán en los conciertos para delirio de fans mientras el intérprete entraba en éxtasis divino.

Georgie Dann
Georgie Dann
El Bimbó
“Bailemos el Bimbó, que está causando sensación” decía la letra y no era para menos. Después de haber sido un éxito en Francia y en medio mundo, Georgie Dann instruye al personal sobre cómo darle alegría al cuerpo en la pista de baile. El trono de la canción disco-pachanga ya tenía su monarca.

Rosa León
Rosa León
Al alba
Primero en la voz de Rosa León y después en la de Aute, su creador, una balada de amor desesperado –el desgarro tan cantado por Jacques Brel– se transforma en una metáfora contra la pena de muerte. Las últimas ejecuciones convierten a la canción en un himno contra la dictadura.

Sisa
Sisa
Qualsevol nit pot sortir el sol
Con la etiqueta de músico outsider, Jaume Sisa emprende un viaje al País de la Infancia, seguramente la única verdadera patria, y acaba creando una de las canciones más sorprendentes de la música popular española. Hasta el título tenía algo de profético.

Massiel
Massiel
Lady Veneno
Massiel le daba una vuelta de tuerca a la tradición cupletera. Cóctel musical desvergonzado y dosis de humor negro para sobresalir en el almibarado paisaje de la canción en femenino de la época. La canción señalará la nueva etapa de la cantante en los años de la Transición.

Los Chunguitos
Los Chunguitos
Me sabe a humo
En el panorama musical español y de la rumba en particular, el desembarco de Los Chunguitos supuso la entrada de aire fresco y un toque canalla de extrarradio. El llamado cine quinqui que triunfará durante la Transición tendrá en ellos una de sus bandas favoritas.

Víctor Manuel
Víctor Manuel
Cómicos
Homenaje a la primera huelga de actores de teatro en el franquismo que sacude la escena española a principios de 1975. Víctor Manuel forjaba su imagen como cantautor engagé, alejado de aquellas primeras canciones regionales y naíf con las que había hecho su presentación.

Lluís Llach
Lluís Llach
Viatge a Itaca
Los versos del poeta griego Konstantinos Kavafis le sirven al cantante como vehículo hacia esa Itaca, metáfora de la vida. En la España del tardofranquismo, Llach ampliaba horizontes musicales y estéticos convidando al personal a compartir el viaje utópico.

Julio Iglesias
Julio Iglesias
Abrázame
En mitad de la década de los setenta Julio Iglesias se afianzaba como el rey de la melodía sin estridencias y romanticismo con gusto de fotonovela. A pesar del ruido político ambiental, Julio Iglesias cantaba y triunfaba y como el que no quiere la cosa hasta se declaraba cantante apolítico.

Joan Manuel Serrat
Joan Manuel Serrat
Piel de manzana
La canción da título a un álbum que quedó desaparecido en las postrimerías del franquismo. Serrat regresaba a las aceras del barrio para evocar aquellas jóvenes con piel de manzana que fueron un poco carne de cañón, quemando sus alas de juventud en los umbrales de los patios.

Mocedades
Mocedades
Secretaria
Vindicación de la figura de la secretaria, la profesión que había simbolizado la mujer trabajadora e independiente en la España del desarrollo. Siguiendo la tónica de otros intérpretes, la formación vasca se apuntaba al cancionero con tintes sociales sin obviar la carga melodramática.

Miguel Gallardo
Miguel Gallardo
Hoy tengo ganas de ti
Realizar una declaración tan categórica como “hoy tengo ganas de ti” en 1975 suponía un paso más en el altavoz de las canciones erótico-amorosas. Bajo la estela de otros melódicos –como Camilo Sesto– Miguel Gallardo se impone en las sesiones de discotecas de los domingos por la tarde.

Elsa Baeza
Elsa Baeza
El Cristo de Palacagüina
Entre el Concilio Vaticano II y la Teología de la Liberación, este Cristo guerrillero y de Palacagüina se colaba para sorpresa de muchos en las listas de éxitos de aquel año con su mensaje bastante subversivo, aunque la voz
de Elsa Baeza le servía de dulce amortiguador.

Lole y Manuel
Lole y Manuel
Nuevo día
Canción y álbum de debut. El flamenco, después del éxito de Paco de Lucía, se abre a una nueva generación con
el dúo Lole y Manuel. A punto de estallar el fenómeno Camarón de la Isla, la voz de Lole parece anunciar otro nuevo día de ecos lorquianos y en libertad.

Cecilia
Cecilia
Mi querida España
En el año del pensamiento mágico para aquellos que deseaban el fin del franquismo, la canción de Cecilia recoge con cierta ambigüedad cuestiones identitarias y nacionales. Hoy la canción hasta podría servir para un mitin del PSOE, Partido Popular y, si me apuran, Vox.

Guillermina Motta
Guillermina Motta
L'any de la dona
A Guillermina Motta nadie le puede sustraer el título de ser una de las pioneras de la canción feminista. Aprovechando que el año 1975 había sido declarado por la ONU como el año de la mujer, la Motta le sacaba humor e ironía a la efemérides.

Triana
Triana
Abre la puerta
La fórmula de rock, música progresiva y flamenco ya había sido ensayada anteriormente aunque ahora el grupo Triana, con la etiqueta identitaria de rock andaluz, le otorgaba su confirmación, convirtiéndose así en una de las formaciones estrellas de la Transición.

Lorenzo Santamaría
Lorenzo Santamaría
Para que no me olvides
Los viejos rockeros nunca mueren pero algunos se transforman en flamantes cantantes melódicos. Lorenzo Santamaría sigue el camino de otros rockeros pasándose al lado triunfante de la melodía con gusto a bolero que parecía escrita para un futuro Luis Miguel.